El futbolista brasileño, que atraviesa una dura etapa profesional con su lesión que demandará 10 meses de recuperación, vivió ahora un momento de mucha tensión familiar.
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Neymar volvió a ser protagonista, de manera indirecta, de una noticia negativa. El futbolista brasileño, que se encuentra recuperándose de su dura lesión de ligamentos, sufre duros momentos desde los personal: en las últimas horas entraron a robar a la casa de su pareja y madre de su hija recién nacida, Bruna Bianccardi.
Tres hombres ingresaron a la casa en la madrugada del martes y tomaron como rehenes a los suegros del brasileño. Los ladrones se llevaron joyas, relojes y dinero, afortunadamente sin dejar ningún herido.
La Guardia Civil Municipal de San Pablo aseguró que los delincuentes acudieron al domicilio en búsqueda de Bruna y su bebé para secuestrarlas. Sin embargo, al no estar presente, terminaron robando pertenencias.
”Los sospechosos robaron bolsos, relojes, joyas y dinero. Un joven de 20 años fue detenido en el acto. El segundo autor ya ha sido identificado y continúan las investigaciones para identificar al tercero y detenerlo”, fue el comunicado del organismo.
Luego de lo sucedido, el propio Neymar escribió un mensaje en sus redes sociales: "Día triste, por el asalto que los padres de Bru han sufrido, pero gracias a Dios se encuentran bien", expresó.
Neymar se encuentra fuera de competencia, luego de que fuera operado el 2 de noviembre de la ruptura del ligamento cruzado anterior y meniscos de la rodilla izquierda y estará 10 meses inactivo.
La grave lesión de Neymar ocurrió el pasado 17 de octubre en el partido frente a Uruguay, por la cuarta jornada de las Eliminatorias Sudamericanas. R3.
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