Fue luego de un ataque que sufrió de parte de perros en el barrio Los Arces donde solía pasear y jugar con otros animalitos.
La historia de Vitto, el zorro gris que vivía en la casa de una rafaelina de barrio Los Arces, nos había enamorado a todos y emocionado. El animalito era amado por todos los vecinos porque siempre andaba por el barrio y jugaba con todas las mascotas. Sin embargo, profundo fue el dolor conocer que ayer su dueña publicaba su desenlace trágico.
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Todo comenzó cuando Agostina salió a pasear con su perro en noviembre del año pasado y se encontró con un cachorrito que su perro había traído en la boca. Lo llevó de inmediato a la veterinaria debido a su mal estado, pero a pesar de las expectativas negativas, el cachorro, se recuperó rápidamente. Sin embargo, pronto descubrieron que Vitto no era un perro, sino un zorro.
“Busqué reservas por todo el país. Recibí consejos, pero nadie lo quería agarrar. Al ser un zorrito gris, anda por todos lados y lo único que me decían era que lo deje estar. Tomé precauciones, investigué qué comen, cómo viven, qué hacen. Así empezó todo”, relató Agostina en una entrevista previo al triste hecho en RADIO RAFAELA.
Vito era muy juguetón con todos los animales tanto de la casa como del barrio y al ser un zorro era muy difícil de contenerlo porque tenía actitudes de gato y trepaba todo y se iba por el tapial.
“Se acostumbró tanto a nosotros que tiene la típica actitud un gato. Siempre pido que no traten de agarrarlo o acariciarlo si él no quiere, para que no se acostumbre tanto a estar con gente y que siga domesticándose más todavía. Ahora intento que salga a hacer sus recorridos nocturnos. No sabe el cazar, pero intento que vuelva a su a su lugar que es la naturaleza”, contó Agostina en aquella ocasión.
La comunicación de la peor noticia
"Lamentablemente Vitto ya no está entre nosotros", expresó Agostina en la entrevista. "Aun no puedo asimilarlo, no puedo dejar de pensar en él. Me destroza el alma, tan chiquito e inofensivo. No pudo defenderse con unos perros que no lo conocían".
"Fueron meses de no parar de pensar cómo protegerlo, cómo cuidarlo, horas buscándolo con sus primeras escapadas, noches sin dormir pensando dónde andará. Pero no pude, se me fue de las manos y terminó todo así", agregó Agostina.
"Lo extraño horrores, se siente su ausencia con sus travesuras y locuras diarias. Te amo para siempre mi zorriperro de mamá", expresó Agostina en un emotivo mensaje hacia su querido Vitto.
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