Qué revelan tus uñas sobre tu salud: 10 señales que conviene atender
Más allá de lo estético, las uñas funcionan como un reflejo del estado general del organismo. Cambios en color, textura o forma pueden advertir problemas de salud.
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Las uñas no solo cumplen una función estética: también pueden ser un indicador del estado de salud. Alteraciones en su aspecto, color o resistencia pueden revelar desde deficiencias nutricionales hasta enfermedades crónicas que requieren atención médica.
Los especialistas recomiendan prestar atención a los cambios y consultar al médico si las alteraciones persisten, ya que un diagnóstico precoz puede ser clave.
Diez señales frecuentes en las uñas y su posible significado
Estrías longitudinales o transversales
Las verticales suelen ser hereditarias y no revisten gravedad. En cambio, las horizontales pueden reflejar interrupciones en el crecimiento y ameritan consulta médica.
Uñas blandas y débiles
Pueden asociarse a anemia, enfermedades reumáticas o crónicas, aunque también aparecen en personas expuestas de forma reiterada al agua.
Separación en capas (onicosquisis lamelar)
Se observa sobre todo a partir de los 50 años y suele relacionarse con el uso frecuente de agua o productos de limpieza.
Uñas amarillas
El cambio de color puede deberse al uso de esmaltes, infecciones por hongos o bacterias, e incluso enfermedades como la psoriasis.
Uñas encarnadas
Más habituales en jóvenes, pueden ser hereditarias o causadas por un mal corte o traumatismos. La elección de calzado y una higiene adecuada ayudan a prevenirlas.
Hongos (onicomicosis)
Se presentan con engrosamiento, cambios de color y material acumulado bajo la uña. Requieren tratamiento específico.
Microtraumatismos
Frecuentes en deportistas o personas que usan calzado ajustado. Producen rayas violáceas o amarillentas que suelen desaparecer al eliminar la causa.
Manchas blancas (leuconiquia)
Contrario a la creencia popular, no indican falta de calcio. Generalmente se originan por pequeños golpes en la cutícula. Solo si son grandes o persistentes pueden asociarse a patologías como insuficiencia renal o cirrosis.
Uñas mordidas (onicofagia)
Además del impacto estético, generan inflamación, microtraumatismos y alteraciones en el crecimiento. También pueden afectar la salud dental.
Déficit de proteínas
La debilidad persistente puede deberse a una dieta baja en proteínas. Una alimentación equilibrada o suplementos pueden mejorar la situación.
Un reflejo de la salud integral
Los especialistas destacan que no todas las alteraciones son graves, pero observar los cambios en las uñas puede ser una herramienta útil para detectar a tiempo posibles desequilibrios en el organismo. Si las modificaciones persisten o se agravan, es fundamental consultar a un profesional de la salud.
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