Se suicidó una enfermera en su departamento del edificio ATE en Barrio Chapero en la ciudad de Reconquista
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Jésica Yanina Romero tenía 31 años, era enfermera, y vivía con su pareja en el departamento 4 A del nuevo edificio de ATE, inaugurado el 13 de diciembre de 2021, en calle 39 (2 de abril) al 859 de Reconquista.
El hecho tuvo lugar el pasado lunes. Allí trabajó la médica policial Jésica Cerf y el Grupo Técnico Criminalístico, quienes reportaron al fiscal de turno, Dr. Leandro Mai, quien dispuso autopsia.
El representante del Ministerio Público de la Acusación informó que si bien todo parece indicar que no hubo delito, por protocolo debe ordenar autopsia porque la persona fallecida es mujer; y se aplica lo que se llama "principio de debida diligencia reforzada". Jésica era oriunda de Villa Guillermina y trabajaba como enfermera en el Hospital Reconquista.
Su pareja es quien llamó a las autoridades. Dijo que, al regresar a su departamento, a las 18:00 del domingo 13 de febrero de 2022, la encontró ahorcada. Es Damián Copetti, chofer de la ambulancia del 107 y bombero voluntario, quien viene de sufrir el suicidio de otro compañero de trabajo, Osvaldo Horacio Sandrigo, 30, quien se quitó la vida el 14 de mayo de 2019.
La palabra del fiscal Dr. Mai tras la autopsia

Una vez finalizada la autopsia el lunes 14 de febrero de 2022, el fiscal a cargo del caso Dr. Leandro Mai, afirmó en ReconquistaHOY que el médico forense no encontró absolutamente nada que indique lo contrario. Es decir que, se trata de un suicidio, vinculado a un cuadro depresivo.
Tal como se mencionó, la autopsia fue solicitada por protocolo, donde se obliga a investigar con mayor nivel de exhaustividad este tipo de escenarios. El cuerpo ya fue entregado a su familia, listo para ser trasladado a Villa Guillermina, donde descansará.
Se conoció una carta donde la enfermera alude al drama de la depresión
Jésica Yanina Romero dejó una carta que firmada de puño y letra, donde refiere al drama de la depresión. Para el fiscal, no hay dudas que fue suicidio y ordenó entregar el cuerpo a la familia para la despedida en el cementerio de Villa Guillermina.
En su carta de despedida, la enfermera transcribe parte de la canción "Amándote", de Jaime Ross, y cuenta el drama de la depresión que padecía, que trató de buscar ayuda en amigos y en su familia, pero que no pudo salir.
Refiere a que es fácil decir "tenés que salir"; "no te encierres"; "caminá"; "corré"; "hacé alguna actividad"; que todo eso es fácil para el que no lo vive en carne propia, pero eso es una enfermedad que se llama "depresión".
Remarca que "nadie sabe lo que sentimos, las cosas que nos lastiman", que "para otras personas es una pavada (pero) para mí no lo es, a mi me duele el alma". Reconoce que "la vida es hermosa para las personas que pueden sobrellevar distintos tipos de situaciones", pero que "lamentablemente, yo no puedo hacerlo".
Después cuenta que "fui víctima de violencia laboral, es más, lo sigo siendo, cuando empecé a darme cuenta ya era muy tarde. Denuncié, me atreví a realizar denuncias, lleva un año el proceso y todavía no hay ninguna respuesta a favor de la víctima". Remite al expediente Nº 00501 - 0186147 - 3 iniciado en el Ministerio de Salud, donde asegura que está "todo lo que pasé, aguanté y soporté".

De todas maneras, deja claro: "Si quieren buscar un culpable de esto, solo soy yo la única responsable de esta decisión". Pide perdón a su madre y le agradece al "gran compañero" de su vida.
ReconquistaHOY

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