El proyecto será enviado a la Legislatura por el Ejecutivo. Advierten que es necesario sacar este tema de la órbita moral y legal. Indicadores internacionales y efecto pandemia.
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La Legislatura santafesina tendrá, en breve, un nuevo proyecto de ley para debatir: se trata de la emergencia en materia de consumos problemáticos y adicciones, iniciativa que anunció el gobernador Omar Perotti el 1° de mayo en el marco de la asamblea legislativa que dio inicio a la apertura del período ordinario de sesiones. "Como siempre decimos, los problemas hay que ponerlos sobre la mesa", dijo el mandatario en ese momento.
Para conocer la magnitud del problema y el detalle de lo que se propone con este proyecto de ley, El Litoral dialogó con Camila Bettanín, presidenta de la Agencia de Prevención del consumo de Drogas y Tratamiento Integral de las Adicciones (Aprecod), que funciona bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social.
"Si este proyecto es acompañado por legisladores de ambas cámaras nos va a permitir construir acuerdos serios en materia de prevención y abordaje con estrategias de participación e involucramiento de todos los niveles y sectores", anticipó la funcionaria.
- ¿Qué aspectos plantea el proyecto de ley?
- Tiene como objetivo implementar políticas públicas que den respuesta en el corto plazo a la problemática del consumo y adicciones, con acciones de prevención integral y territorial, promoción de la salud comunitaria, investigación y formación de recursos humanos especializados.
Propone la creación del Programa de Emergencia en materia de consumos problemáticos y adicciones Santa Fe + Cuidada que se abocaría a los ejes de prevención, campañas en los medios de comunicación, participación de Aprecod en la estrategia de comunicación oficial y, con el Poder Judicial, establecer protocolos y acciones conjuntas. También pone el foco en la asistencia y tratamiento, priorizando a grupos más vulnerables.
Tiene cuatro ejes de acción: asistencia y acompañamiento, fortalecimiento institucional y territorial, prevención comunitaria, educativa y comunicacional, y la formación continua e investigación.
- ¿De qué diagnóstico de situación se partió para proponer esta ley?
- Hay indicadores a nivel internacional que se repiten en todos los países del mundo, como el incremento de manera sostenida e ininterrumpida en el tiempo de los niveles de consumo de sustancias psicoactivas. Esto, agravado por los efectos de la pandemia por Covid-19.
Otro indicador internacional es la disminución en las edades de consumo de sustancias, es decir que es cada vez más temprano. También se repite en todos los estudios que el alcohol es la sustancia con mayor prevalencia, por lo que hay cuestiones culturales que hay que trabajar para desnaturalizar ciertos consumos.
Otro aspecto que se repite es la marcada desigualdad de género en el acceso a dispositivos de cuidados y de tratamiento, porque muchas veces las mujeres están a cargo del cuidado de otras personas y tienen mayores barreras respecto de los hombres. Y en los sectores de mayor vulnerabilidad social, aumentan los riesgos de sufrir trastornos por el consumo de sustancias asociados a situaciones de violencia.
En lo que respecta a la provincia de Santa Fe, hay características particulares en cada una de las localidades que tienen que ver con la densidad poblacional, el nivel institucional de reconocimiento de la problemática y del acceso a un tratamiento o a un espacio de orientación y atención.
El reconocimiento institucional respecto del tema genera las condiciones para que la persona que sufre pueda llegar a recibir atención. Todos esos puntos forman parte del diagnóstico.
- ¿En el caso de Santa Fe se repiten los mismos indicadores que mencionaste antes a nivel internacional?
- En el último año y medio venimos fortaleciendo la red provincial de abordaje y prevención; triplicamos la capacidad de atención con un crecimiento en cantidad y complejidad, y creamos canales directos de atención como el 0800 3455640 que funciona de lunes a lunes de 8 a 12 de la noche.
Vemos que estas acciones son el camino porque los resultados son positivos y se llega cada vez a más personas.
La dimensión del problema que estamos enfrentando está en claro crecimiento y tiene que ver con el efecto de la pandemia, la fragilización o la interrupción de proyectos de vida, donde el consumo se presenta como una solución a problemas individuales. En ese punto es donde se tiene que dar la discusión cultural y aportar las herramientas para enfrentar eso que se presenta como una falsa solución. Porque el consumo no resuelve ninguno de estos problemas y puede llevar a la muerte, por lo cual es importante fortalecer a las instituciones en el territorio, con presencia en las escuelas, inclusión laboral y espacios donde la persona se pueda desarrollar.
- Mencionás un antes y un después de la pandemia, ¿cómo incidió la crisis sanitaria por Covid-19 en el aumento del consumo de sustancias?
- Principalmente por lo que implicó el encierro, la angustia, la posibilidad de atravesar la enfermedad, por la interrupción de un proyecto de vida, el impacto que significó sostener los estudios, el trabajo; en muchos casos implicó el distanciamiento de lazos sociales y el alejamiento de cosas que nos aferran a la vida como un estudio en cualquiera de los niveles o una rutina de trabajo. Todo eso generó un aumento del sufrimiento subjetivo, con problemáticas de salud mental donde el consumo también es parte. Y post pandemia, cuando el sistema de salud se relajó de la atención específica del Covid, se vio un crecimiento de la consulta por estas temáticas vinculadas con el padecimiento subjetivo.
- Por lo que expresás, este proyecto tendrá un anclaje importante en salud mental.
- Los consumos problemáticos están dentro del campo de la salud mental. Si bien este proyecto es específico de consumos problemáticos, estamos hablando de salud mental. El consumo nunca viene solo, es la otra cara de la moneda y siempre hay allí una persona que está atravesando una dificultad.
- Un planteo que se repite entre quienes tienen un familiar o alguien cercano que atraviesa una situación de consumo es que hay limitaciones a la hora de lograr una atención o que no se sabe adónde recurrir.
- Venimos desarrollando canales para lograr una mejor accesibilidad. Una de las primeras cosas que hicimos post pandemia fue crear este 0800 3455640 que no existía y es un canal directo, un centro de atención gratuito en consumos problemáticos que funciona todos los días de 8 a 12 de la noche. Cualquier persona que está atravesando por una problemática de consumo, sea en forma directa o pertenezca al entorno, se puede comunicar.
En la ciudad de Rosario, por la densidad poblacional, sumamos un centro de atención inmediato presencial o virtual para la población de la ciudad y del sur provincial.
Hay características que son propias de los consumos problemáticos que hacen más difícil la llegada: hay casos en que la persona no identifica que tiene un problema pero sí lo reconoce el entorno y esto genera un sentimiento de angustia. Probablemente las personas que atraviesan una situación de consumo problemático no van inmediatamente a una guardia; por eso hay que pensarlo como un tema socio sanitario que antes se manejaba con paradigmas más vinculados con la seguridad. Eso ha tenido su impacto a nivel social y moral que explica que muchas veces no se identifica que se debe acudir al sistema de salud.
"Es necesario sacar este tema de la órbita moral o penal y ubicarla en el ámbito socio sanitario que es lo que nos va a permitir trabajar mejor y a la gente consultar a tiempo y no cuando el deterioro es más grande y requiere de intervenciones más intensivas".
Dónde acudir
Línea gratuita 0800 3455640, todos los días de la semana, de 8 a 24.En Rosario y sur provincial: Centro de Atención Inmediata para el abordaje de los consumos problemáticos, España 1455, lunes a viernes de 8 a 14, sin turno previo.
Para quienes quieran conocer más sobre la Agencia, ingresar a santafe.gov.ar, ir a Desarrollo Social, de allí a Aprecod donde se puede acceder al mapa de Centros de asistencia
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Una definición
Para la redacción del proyecto de ley, explica Camila Bettanin, presidenta de Aprecod, se tomó la definición de consumo problemático que forma parte de la ley 26.934, Plan Integral de abordaje de consumos problemáticos (plan Iacop).
Ésta entiende por consumos problemáticos aquellos que "mediando o sin mediar sustancia alguna afectan negativamente, en forma crónica, la salud física o psíquica del sujeto, y/o las relaciones sociales. Los consumos problemáticos pueden manifestarse como adicciones o abusos al alcohol, tabaco, drogas psicotrópicas legales o ilegales o producidos por ciertas conductas compulsivas de los sujetos hacia el juego, las nuevas tecnologías, la alimentación, las compras o cualquier otro consumo que sea diagnosticado compulsivo por un profesional de la salud".
Fuente: EL
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