Ocurrió este sábado en la ciudad de Santa Fe. El pequeño continúa internado en el Hospital de Niños.

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Este sábado, en inmediaciones de Ayacucho y Camino Viejo a Esperanza, en barrio Juventud del Norte de la ciudad de Santa Fe, un nene de cuatro años de edad sufrió un un accidente doméstico por lo que se le dio aviso a la Central de Emergencias.

Según indicaba el reporte policial, el pequeño, identificado como I. B. M. de cuatro años, se encontraba en su casa cuando, por causas que se tratan de establecer, se quemó con aceite de cocina.

El nene fue trasladada de manera urgente al Hospital Iturraspe, donde recibió las primeras curaciones y luego fue derivado al Hospital de Niños para una mejor atención. Allí, los profesionales indicaron que presentaba un 30% de su cuerpo quemado, y debió quedar internado en terapia intensiva con asistencia respiratoria mecánica en grave estado.

Pablo Ledesma, subdirector del Hospital de Niños Orlando Alassia afirmó que "El niño de cuatro años y medio de edad ingresó en horas de la tarde del sábado, ya producto de una quemadura presentaba una superficie de la piel lesionada, que se evaluó como se hace siempre al ingreso y luego de las primeras atenciones se reevaluó. El paciente tenía una superficie del cuerpo quemado que está en torno al 25% o 30%. Por las características de las heridas, muy probablemente por el gran dolor hay pacientes que entran en shock y por ese motivo que lo colocamos en la asistencia respiratoria mecánica".

Cuando se le preguntó por la evolución del pequeño, el médico detalló: "El fin de semana estuvo estable con las curaciones y el tratamiento propio de las quemaduras y seguimos observando el descenso de los parámetros, algunos se se bajaron para tratar de extubarlo y destetarlo lo más rápido posible del respirador".

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Cuando se lo interpeló en qué áreas del cuerpo tenía las lesiones el niño, el subdirector del Alassia destacó que tenía quemados el "torso y miembros". E insistió que debieron intubarlo por el dolor intenso que producen las quemaduras y se "estiran las terminaciones nerviosas y deprimen el sensorio por lo cual el paciente entra en shock".

Al consultar cuál es la situación actual que tiene el paciente y si corre peligro su vida admitió: "El niño sigue estable y ahora hay que procurar sacarlo del respirador y lo esencial es prevenir las infecciones ya que la piel es la barrera natural contra las mismas. Lo principal es ver su evolución ya que no presentó desmejorías". DiarioUNO