Cuando la policía se enteró de todo, el sujeto confesó los hechos. Todos los elementos fueron secuestrados.
Un hombre de 70 años denunció en Destacamento N°7 que el lunes se dio cuenta que le faltaba su bicicleta playera, rodado 26. Se la habrían sacado desde el garaje de su casa, que tenía el portón cerrado, pero sin llave.
Al mismo tiempo, les informó a los efectivos que tomó conocimiento mediante un vecino que la bicicleta estaba tirada en una esquina. Los uniformados llegaron hasta el sector indicado, donde se encontraron con un sujeto golpeando con un fierro cromado una bicicleta color gris tirada en el suelo.
Cuando el violento notó al móvil policial, se retiró e ingresó a una vivienda. De inmediato, los efectivos se trasladaron hacia la casa en cuestión y fueron atendidos por un hombre de 44 años de edad. Este hombre indicó que el dueño de la bici le debía dinero por un trabajo que había realizado y por eso reaccionó de esa manera.
En ese momento, hizo entrega voluntaria del caño de metal cromado, y los efectivos procedieron a su formal secuestro. Por otro lado, la bicicleta playera gris, que ya estaba en regular estado de conservación, fue entregada a la víctima.
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