La viuda de Perona y su cómplice seguirán presas por amenazas, tiros y estafas: ¿por cuánto tiempo?

La Justicia prorrogó por un año la prisión preventiva de Lorena Córdoba —viuda del fallecido zar del juego rafaelino David Perona— y Mariana Ortigala, excolaboradora de Esteban Alvarado, por su presunta participación en una trama de extorsiones, balaceras e incendios contra el dueño de la cadena de loterías El Califa, en Rosario.

Ambas habían sido imputadas en septiembre de 2023, junto a otras siete personas, incluido Ariel “Guille” Cantero, líder de Los Monos. El objetivo: forzar el pago de una suma millonaria bajo amenazas y ataques, para permitir el funcionamiento de las agencias de apuestas.

Extorsión, balaceras y amenazas

La investigación detalla que los aprietes comenzaron cuando Ortigala y su pareja, Rodolfo Felipe, abordaron al empresario Cristian Q. en un gimnasio: “Me manda la mafia y tenés que pagar 1,5 millón de dólares”, le dijeron. Luego, Lorena Córdoba visitó una de las sucursales y dejó un número de contacto exigiendo el pago de una deuda.

Posteriormente se registraron tiroteos e incendios en al menos cuatro locales y un ataque directo a la casa del empresario, ubicada en el barrio residencial La Florida. Según los fiscales, otros integrantes de Los Monos —algunos ya detenidos— participaron de esta segunda etapa de la campaña extorsiva

Prisión prorrogada

Los fiscales Juliana González y Federico Rébola pidieron este miércoles una prórroga extraordinaria de la prisión preventiva para Ortigala y Córdoba, medida que fue aceptada por la jueza María Trinidad Chiabrera. La extensión es por un año más, hasta el 11 de septiembre de 2026, ante la inminencia del vencimiento del plazo original.

A la acusación por extorsión, Mariana Ortigala suma otros delitos: tenencia ilegal de armas, falsedad ideológica, uso de documento falso y una estafa inmobiliaria contra un hombre mayor que vivía en un geriátrico. La mujer logró que el anciano firmara un boleto de compraventa por una propiedad en Funes, pero nunca abonó los $2,2 millones prometidos. Años después, los herederos del hombre fallecido recibieron amenazas para que desistieran de la denuncia.

Por su parte, Lorena Córdoba fue imputada además por intimidaciones a través de Telegram a una persona de San Lorenzo, a quien exigió pagos semanales de $50.000. La víctima transfirió dinero y entregó una camioneta Ford Ranger bajo amenaza.