Héroes en uniforme, salvaron a niña de 10 meses asfixiada: “Enseguida comencé con las maniobras de RCP”
Dos efectivos de Guardia de Infantería actuaron rápidamente para reanimar a la beba que se encontraba sin respiración, logrando estabilizarla antes de su llegada al hospital.
En la noche del viernes, personal del Cuerpo Guardia de Infantería se encontraba en la Subcomisaría Primera cuando un hombre se acercó en estado de desesperación. Su hija, de solo 10 meses, había dejado de respirar y presentaba una coloración azulada en su rostro.
Sin dudarlo, los efectivos subieron a la niña al móvil policial y se dirigieron al hospital, alertando a los demás móviles para que abrieran paso. Mientras tanto, realizaron maniobras de desobstrucción de la vía aérea, sospechando que la niña había ingerido un objeto extraño. Tras unos momentos de tensión, las maniobras dieron resultado y la menor comenzó a respirar nuevamente.
Gracias a la rápida intervención del personal policial, la niña llegó al hospital estable, donde fue atendida por los profesionales de la salud. El accionar del equipo de Infantería permitió salvar la vida de la pequeña.
El relato en primera persona
El Suboficial Mendoza Bryan y la Oficial Romero Ana que fueron quienes llevaron adelante la maniobra que ayudó a la familia. Los agentes en diálogo con Radio Rafaela, contaron más detalles del hecho, que se desencadenó en barrio Monseñor Zazpe.
Por su parte, la Oficial Romero indicó que eran aproximadamente las 21.30hs cuando se encontraron con la escena. “Estábamos con mi compañero en un procedimiento en la Subcomisaría Primera. Yo me encontraba afuera, mi compañero estaba con un aprehendido en el interior de la sede policial”, comenzó contando.
En ese momento, detectó a varias personas dirigiéndose a comisaría a los gritos. La Oficial pudo detectar lo que pasaba cuando vio al padre de la menor “con la nena en brazos ya desvanecida, diciéndome que no podía respirar”. “De inmediato, tomé la nena en mis brazos y comencé con las maniobras de primeros auxilios”, dijo.
Por su parte, el Suboficial Mendoza, contó que enseguida se subieron “al móvil policial junto con los padres. Ahí ya avisamos al 911 que de aviso para que los móviles que se encontraban en la calle empiecen a escoltarnos para poder llegar rápidamente al hospital”.
“En el trayecto, seguía haciendo más maniobras mientras mi compañera manejaba”, contó. Finalmente, en la intercesión de calle Maggi y Cervantes, “la beba vomitó y empezó a respirar y llorar. Ahí ya nos entró la alegría y tranquilidad de sentir que volvió a respirar”, dijo.
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