En una entrevista exclusiva con Radio Rafaela, Marisel Ojeda, dueña del local Circular Rafaela, desveló los secretos detrás de la tendencia en auge: la moda circular. Desde la comodidad de su hogar, nos contó cómo surgió la idea y por qué se ha convertido en una interesante alternativa.

Marisel explica que la moda circular es más que un simple término de moda. Es la respuesta a la ropa que yace olvidada en los armarios, ya sea porque queda grande, pequeña o simplemente ha pasado de moda. "Es ropa que la gente ya no usa, que ocupa espacio en el placard. La gente me la trae, me la deja, y a medida que se va vendiendo, se va pagando", afirmó durante la entrevista con Radio Rafaela.

Hace aproximadamente quince años, Marisel inició su travesía en el mundo de la moda circular, dejando de lado una faceta como compradora compulsiva. Luego de esto, decidió compartir su excedente textil con otros: "Arranqué vendiendo mi ropa porque tenía mucha y no sabía dónde ponerla", recuerda. Sin embargo, después de cerrar y abrir un local con ropa nueva, volvió a sus raíces, reconociendo que la moda circular es lo que más se mueve hoy en día.

Con la comodidad de tener su negocio en casa y una hija de diez años, Marisel ofrece un servicio único: "La gente me trae la ropa, la deja y, a medida que se vende, realizamos la transferencia", explicó. Destacó la conveniencia de este método, evitando a los clientes el traslado hasta su casa. La emprendedora agrega que el boca a boca ha sido clave para su éxito: "Una amiga comenta, otra se suma, y así sucesivamente".

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En cuanto a los tiempos de pago, Marisel detalla que varían según la velocidad de venta de la prenda. "Si es ropa que sale rápido, se paga a la semana o a los quince días. Para vestidos de noche, que son más lentos en salir, puede demorar un poco más". La moda circular, según Marisel, experimenta un auge significativo en temporadas como fin de año, despedidas y graduaciones, donde la demanda de la "ropa de noche" se dispara.

Al preguntarle sobre la posibilidad de canje, Marisel lo descarta categóricamente: "No, canje no. Prefiero que traigan la ropa, la dejen, y luego vengan a retirar el dinero. No me gusta eso del canje, de traer, llevarme y ya está", expresó con firmeza.

En conclusión, Circular Rafaela no solo es un negocio para Marisel, sino una forma de impulsar la sostenibilidad y la economía local. Con su enfoque único en la moda circular, esta emprendedora demuestra que la moda puede ser no solo una expresión personal, sino también una oportunidad para renovar y compartir prendas en desuso. La tendencia está clara: en Rafaela, la moda no solo se viste, sino que también gira en círculos.