El Concejo Municipal de Rafaela distinguió a Marta Engler en el marco del ciclo “Mujeres que dejan huellas”. Con una vida dedicada a la educación y al servicio público, Marta pasó por Radio Rafaela y rememoró sus inicios como maestra rural y el inesperado camino que la llevó a ocupar cargos clave en la gestión municipal.

"Mi primera etapa fue la de docente. Empecé en Vila y luego pude trasladarme a Rafaela, donde trabajé 10 años en la Escuela Rivadavia y otros 10 en otra la escuela Alberdi", recordó.

El inesperado llamado de la política

Fue en ese contexto que, por azar, el entonces intendente Omar Perotti se cruzó con ella. “No lo conocía, y él tampoco a mí. Pero me propuso trabajar con su equipo”, relató. Pese a sus reticencias iniciales —“yo quería quedarme en la escuela”, confesó—, la decisión ya estaba tomada: “Me dijeron ‘la decisión ya la tomamos nosotros’ y terminé en el hospital”.

La sorpresa fue general: “¿Qué va a hacer una maestra dirigiendo el hospital?”, escuchó decir. Pero con humildad y determinación, Engler se apoyó en quienes menos se esperaba. “Los que me dieron una mano increíble fueron los chicos de cuarto y quinto año de las escuelas secundarias”, destacó sobre ese tema.

La semilla de la Escuela del Barrio Amancay

Uno de los momentos más emocionantes de la charla fue cuando recordó cómo se gestó la construcción de la Escuela del Barrio Amancay. A partir de un dato del censo escolar, advirtió la urgente necesidad de crear una institución educativa en la zona. “Le dije a Perotti: vos la necesitás, la ciudad la necesita ya”, relató.

La solución fue una medida audaz: “Se les pidió a los directores de las escuelas que, durante seis o siete meses, no recibieran el Fondo de Asistencia Educativa, salvo casos graves, para destinar todo a la nueva escuela”. Lejos de generar resistencia, la propuesta encontró apoyo unánime. “Todos dijeron que sí”, afirmó.

“Fue el semillero que después permitió que la escuela creciera. Sin la colaboración inteligente de esos directores, no hubiera sido posible”, concluyó.

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