Así lo afirmó Germán Bottero a Radio Rafaela, desde su lugar en el gabinete municipal. Se refirió a los cambios que se aplicaron desde el inicio de la gestión y señaló algunas irregularidades que encontraron y que están intentando subsanar.
A casi seis meses del inicio de esta nueva gestión municipal, el secretario de Gobierno y Modernización de la Municipalidad de Rafaela, Germán Bottero, pasó por los estudios de este medio. En entrevista con la radio, habló sobre todos los proyectos en marcha en los que se encuentra involucrado, especialmente en estos días.
“Se juntan varias cuestiones, presentamos el mapa social este jueves y el viernes tengo el informe de gestión de semestral. Nos toca por primera vez en esta nueva gestión de Leo Viotti como intendente ir a informar al Concejo”, comentó, haciendo un breve resumen de esta cargada semana.
Habiendo pasado las primeras semanas de trabajo a cargo del Ejecutivo local, comienza a aparecer la verdadera impronta de esta nueva gestión, reflexionó Bottero. En esa línea, el funcionario recordó que la mayor parte del equipo de gabinete actual no estaba dedicada a la función pública.
“Si venís de lo privado, los tiempos son distintos, los códigos son distintos, las formas son distintas. Ahí hubo un tiempo de acomodar ciertas cuestiones”, indicó. Al mismo tiempo, añadió que la ciudad venía de muchos años de gestión de una misma línea política, por lo que “las cosas se hacían de cierta manera”. En ese sentido, “cambiar o querer hacerlas de otra manera, también lleva su tiempo”, sostuvo.
Tras recibir algunas críticas en las primeras semanas, “las observamos y tomamos nota”, indicó Bottero. Ahora que fueron superadas, empieza a notarse con mayor claridad “lo que queremos hacer”, dijo el funcionario. Al respecto, enumeró que desean “estar más presente en el control, en el espacio público, en el tránsito, recuperar ciertas cuestiones en los servicios comprar cámaras y móviles para la GUR”, etc.
El objetivo principal es seguir avanzando tomando la premisa que el gobierno nacional repite hasta el cansancio: “no podemos gastar más de lo que tenemos”. Más allá de la simpatía o no por el presidente de la Nación, Bottero sostuvo que “la consigna quedó y debería quedar en la Argentina”.
Cambios desde el Ejecutivo
Al asumir en el gobierno local, “hemos hechos algunos cambios en la planta municipal, sin echar a nadie. Había un temor infundado adrede y de forma maliciosa diciendo que llegábamos a cortar contratos. Y se cortaron algunos contratos de algunos empleados que ya en la gestión anterior era considerado que su desempeño no era el necesario para el lugar que ocupaban, pero nada más que eso”.
“Se hizo un trabajo con las horas extra, que no significa eliminarlas. Eliminamos las horas extra que no tenían sentido y que quizás se pagaban sin trabajarse. Los lugares en los que consideramos prioritarios, como en servicio público, la GUR y Protección Vial, las horas extra se mantienen porque las controlamos y se trabajan” comentó el funcionario.
“Estamos siendo muy prudentes, evitando dar anuncios que nos podrían exceder, siendo muy responsables en la obra pública, pidiendo a la provincia que sea clara. Vamos a terminar el Nuevo Hospital, vamos a hacer el Camino 6, también vamos a recuperar la colectora del CRAR con Vialidad Provincial que es necesaria para dar tranquilidad a chicos y chicas. Esto es lo que podemos hacer hoy, estamos peleando con el gobierno nacional por muchas cuestiones, pero no tenemos noticias para dar por lo que preferimos ser prudentes”, comentó.
“El 10 de diciembre empezó la gestión. Si nos hubiéramos quedado hablando de la herencia recibida, ya hubiéramos cansado a la gente y no le hubiéramos dado respuestas. La respuesta la das gestionando. A partir de esa fecha, los problemas son nuestros y el rafaelino es muy demandante. Viotti nos indicó que ahora somos los responsables de que la ciudad esté como queremos que esté, como el rafaelino está acostumbrado, y siempre vamos a tratar de darles cosas un poco mejor, nunca ir para atrás”, añadió.
La creciente demanda social
El funcionario de Gobierno y Modernización afirmó que “la demanda social está creciendo, es una realidad”. Eso “impacta fundamentalmente en quien está más cerca, como las instituciones (merenderos, copas de leche, Iglesia). Nosotros no hemos cortado ninguna ayuda social, incluso la hemos incrementado. Pero sí hemos revisado algunas cuestiones, porque en Rafaela también hubo mucho de gestión o intermediación donde alguien se quedó con una parte un poco más grande. Eso estamos tratando de subsanarlo”, dijo.
Al mismo tiempo, sostuvo que hay una mutación constante, con “merenderos que se armaron y que dejaron de abrir, pero les siguió llegando la ayuda”. “Estamos tratando de ser lo más rápidos y finos posibles para que la ayuda vaya a donde realmente se necesita. Pero la demanda social se incrementó e intentamos dar respuesta en la medida de nuestras posibilidades, intentando ser más transparentes y más justos evitando intermediarios”.
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