Marcelo "Piki" Benitez, reconocido tatuador de la ciudad, compartió su experiencia y pasión por su oficio en una entrevista exclusiva con Radio Rafaela en conmemoración del Día Internacional del Tatuaje, que se celebra el 17 de julio.

Con 13 años de trayectoria en el mundo del tatuaje, Piki se define a sí mismo como un apasionado de su profesión. Desde temprana edad, su inclinación por el dibujo era evidente, lo que a veces le valía algunos retos por parte de sus maestros, quienes lo veían dibujando en plena clase. Sin embargo, cuando se mudó al sur, tuvo más tiempo libre y comenzó a adentrarse en el fascinante universo del tatuaje.

"Tenía tiempo de más y ahí empecé a curiosear en el tema del mundo del tatuaje y empecé a comprar mis primeras máquinas", relató Piki durante la entrevista. Sus primeros equipos eran máquinas económicas, pero eso no impidió que el talentoso artista comenzara a trabajar y a utilizar a sus compañeros de trabajo como "conejillos de india" para sus primeras creaciones.

Aunque el tatuaje abarca una amplia variedad de estilos y técnicas, Piki confesó que su preferencia se inclina hacia el realismo y el fotorrealismo tanto en color como en la técnica conocida como "black and grey" o negro y gris. "Es lo que más me gusta hacer", afirmó con entusiasmo.

Cuando se le preguntó si tenía algún tatuaje favorito o destacado en su carrera, Piki explicó: "Mira, una en particular no, o sea, todos los tatuajes por ahí que hago me gustan, siempre uno trata de aprender un poco más. Yo, por ejemplo, cuando lo miro digo: 'nunca está el tatuaje perfecto', siempre decía 'le cambiaría esto o aquello'. Entonces, continuamente te estás exigiendo para perfeccionarte".

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Pese a su experiencia y a la pasión que Piki transmite en cada palabra, el tatuaje todavía enfrenta algunos desafíos en la ciudad de Rafaela. "Acá falta todavía un poco más lo que es la cultura del tatuaje", lamentó el artista. Aunque lleva más de una década tatuando en la localidad y ha sido partícipe de las primeras convenciones, considera que la mentalidad de las personas aún no está completamente abierta a esta forma de arte. "Por más que ya hace unos 13 años que yo estoy tatuando y trajimos las primeras convenciones, todavía falta abrir más la cabeza a la gente. No tienen idea de que en la piel por ahí llevan una obra de arte", expresó con convicción.

Uno de los obstáculos a los que se enfrentan los tatuadores en Rafaela es la competencia y las disputas en torno a los precios. Piki explicó que debido a la gran cantidad de tatuadores en la ciudad, los clientes suelen regatear y pelear por los precios, lo que dificulta el desarrollo y reconocimiento del arte del tatuaje.

"Aquí en Rafaela, como en muchas otras ciudades, la cultura del tatuaje todavía está en proceso de consolidación. A diferencia de Buenos Aires, Rosario y Santa Fe Capital, que llevan muchos años más de experiencia en este ámbito", añadió.

Mirá la entrevista completa con Marcelo "Piki" Benitez: