Camila Bender, tatuadora de mujeres, compartió en RADIO RAFAELA su experiencia y filosofía sobre el arte del tatuaje, desde sus inicios hasta su enfoque personal y profesional, junto a la creación de diseños únicos y significativos para sus clientas.
Camila encontró su pasión por el tatuaje hace unos cuatro años, aunque sus comienzos en el arte son un tanto borrosos. "La línea es medio borrosa porque yo hacía otras cosas. De pronto me empiezo a tatuar y después salto como tatuadora todos los días," explica. Inicialmente, Camila estudiaba una carrera en Santa Fe y cuidaba de su hijo, lo que le impedía viajar. Sin embargo, la pandemia cambió su rumbo.
"Volvió lo de la pandemia a la normalidad y yo ya tatuaba porque tenía amigos que tatuaban y me enseñaron. Empecé tatuando a amigos y colegas, y de pronto tatué a un montón de gente. Ahí fue cuando me empecé a tomar esto profesionalmente," recuerda. Dejó su carrera para dedicarse de lleno a tatuar, una decisión que requirió mucha práctica diaria.
Camila atiende principalmente a mujeres que suelen llegar con ideas claras sobre lo que quieren. "Me dicen 'Cami, quiero esto, con esto, con esto.' Les armo algo, les mando el diseño, me dan el ok, y charlamos sobre los detalles," comenta. La preparación y la higiene son aspectos cruciales en su trabajo. "Las cosas tienen que estar súper esterilizadas, no debe haber una gota de polvo, ni de sangre, ni de nada."
El proceso completo de un tatuaje puede durar entre dos y cuatro horas, dependiendo del diseño. Camila llega una hora antes para preparar todo. "Yo limpio todo, sanitizo de nuevo, pero ellas también tienen cuidados de 15 días en total. Queremos que el tatuaje dure toda la vida, lindo, que es lo que queremos."
En cuanto al estilo que maneja, la creadora de Bender Tattoo Studio prefiere enfocarse en diseños estéticos que resalten la belleza de sus clientas. A pesar del existente pánico a las agujas, se asegura de que sus clientas se sientan relajadas. "Nos tomamos unos mates y ni se dan cuenta de que ya terminamos."
Camila también destaca la importancia de la calidad de los materiales que utiliza y el valor de los tatuajes, que pueden variar considerablemente. "En Rafaela, los sueldos no son tan altos como en otros lugares, así que uno se tiene que adecuar. Por el momento, mis tatuajes empiezan en 35.000 pesos," concluyó.
El Día Internacional del Tatuaje es una oportunidad para celebrar este arte y reconocer a artistas como Camila, que han encontrado en el tatuaje no solo una profesión, sino una forma de expresión y conexión con sus clientas.
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