Balance positivo de la Junta Médica Municipal: "Ahora, aquel que no está enfermo, directo a trabajar"

La subsecretaria de Auditoría, Evaluación y Transparencia del Municipio de Rafaela, Silvina Imperiale, realizó un balance del primer año de funcionamiento de la Junta Médica Municipal y aseguró que la experiencia fue positiva tanto para la administración como para los trabajadores. 

Según explicó a Radio Rafaela, el objetivo central fue poner fin a situaciones irregulares vinculadas a licencias prolongadas sin control, sin dejar de lado el acompañamiento a quienes realmente atravesaban problemas de salud.

Imperiale recordó que la iniciativa surgió a partir de detectar “licencias eternas y licencias que se renovaban mensualmente”, muchas veces sin criterios claros. “Era dudoso”, describió, y explicó que, tras analizar la situación junto al intendente Leonardo Viotti, se decidió avanzar con un mecanismo que garantizara equidad.

“Que el que está enfermo realmente sea acompañado, y desde nuestro lugar hacemos todo lo posible para acompañarlo”, afirmó.

Un sistema con control e imparcialidad

A partir de esa evaluación, se abrió un expediente que derivó en la creación de la Junta Médica Municipal, integrada por tres profesionales. Imperiale detalló que uno de ellos fue el médico municipal, con una extensa trayectoria en el municipio; otro fue el profesional designado por el sindicato, el doctor López; y el tercero fue un médico externo, proveniente de la ciudad de Santa Fe.

“Conseguimos a un profesional de afuera, con lo cual garantizamos la total imparcialidad”, subrayó, al señalar que no conocía ni a los pacientes ni a quienes habían otorgado los certificados.

La funcionaria explicó que la Junta no solo evaluó si una persona estaba en condiciones de volver a trabajar, sino también qué tipo de tareas podía realizar. “Probablemente, si trabajabas en la recolección, no podías salir a correr todas las noches, pero sí a lo mejor podías hacer una tarea en una oficina o en el pañol”, ejemplificó, y remarcó que antes esas alternativas no se analizaban.

En cuanto a los resultados, Imperiale precisó que se evaluaron 18 casos. “Tres se volvieron al trabajo, y las otras personas fueron acompañadas por la Junta con distintos estudios, pedidos y procedimientos”, explicó. En esos casos, los profesionales determinaron que no estaban aptos para retomar sus funciones y que necesitaban un seguimiento específico.

Para la subsecretaria, ese fue uno de los principales logros del sistema. “Considero que la creación de la Junta ha sido un éxito porque no solo pudimos reintegrar al trabajo a quienes no lo hacían, sino que además tuvimos la posibilidad certera de acompañar a quienes lo necesitaban”, sostuvo.