Ante la difícil situación económica, ¿cuántos rafaelinos eligen la reparación de calzado?

Germán Tessio es zapatero en la ciudad de Rafaela. Con la crisis actual, se encontró con más clientes que se acercan a solicitar sus servicios.

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Este miércoles, el INDEC informó que la inflación de enero fue 20,6% y acumuló 254,2% en el último año. La pérdida del poder adquisitivo en ese contexto provocó una marcada desaceleración en el consumo.

La indumentaria y el calzado no son excepción. Por eso, muchos rafaelinos que se encuentran con algunas roturas, deciden acercarse al zapatero de confianza en búsqueda de la reparación evitando comprar calzado nuevo.

Así lo confirmó Germán Tessio a Radio Rafaela. En charla con este medio, precisó que hace “oficialmente ocho años que vivo de esto”.

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Una historia de vida

“Cuando estaba por los 28 años de mi vida, me había quedado sin trabajo. Estaba casado, tenía dos hijos y, mientras buscaba trabajo, estaba en el almacén de mi mamá”.

En ese contexto, dio con “una vecina cuyo marido fallecido era zapatero, muy conocido en la ciudad, concretamente en Boulevard Lehmann”. Ella pasaba por el almacén “y decía que le seguían llevando trabajo”. Aunque “sabía hacer algo por los años que estuvo con su marido, ya no era lo mismo”.

Si bien, Germán nunca se imaginó dedicarse a esa profesión, comenzó a trabajar con esta vecina. “Tenía 28 años y prácticamente nunca había ido a arreglar nada”, contó. Sin embargo, se encontró con mucho trabajo y eso lo obligó a aprender mucho más.

“Venía bastante gente a traer, así que fui de otro zapatero conocido que todavía está vigente que me enseñó. Fui un tiempo, muy amable, y así fue que de a poco me empecé a conseguir las máquinas de coser, las herramientas y empecé a largarme de a poco en el oficio”, relató.

Después de un par de años, “en la escuela de oficio Eva Perón se editaba por primera vez el curso de reparador de calzado y me anoté. Ya venía viviendo de esto, pero ese curso fue de un año de duración y me abrió más la cabeza, aprendí mucho más todavía”.

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La reparación en tiempos de crisis

En estos meses muy complejos para muchos por la situación económica, Germán se encontró con un incremento en su clientela. “Tal vez, la crisis hace que vengan más, pero los freno con la seña”, contó.

“Me manejo con seña porque, en los momentos que estamos viviendo, los insumos son muy caros. Además, la gente se maneja mucho con transferencia, no andan con plata encima”, explicó.

Al mismo tiempo, dijo que necesita poner cierto límite en la atención diaria. “Como saben que vivo acá, me tocan el timbre en cualquier momento del día, pero trato de manejarme en horario de comercio para la atención”, sostuvo.