Plantas tóxicas para gatos:¿cuáles evitar? Y ¿cómo actuar ante una intoxicación?

Tener un gato en casa implica cuidados especiales, sobre todo si hay plantas. Aunque los felinos suelen ser independientes, su curiosidad puede llevarlos a morder, lamer o ingerir hojas y flores, exponiéndose a sustancias tóxicas que pueden causar desde malestar leve hasta cuadros graves de intoxicación.

Cuáles son las plantas más tóxicas para los gatos

Muchas especies ornamentales contienen compuestos que los gatos no pueden metabolizar correctamente, afectando su sistema digestivo, nervioso o renal. Entre las más peligrosas se destacan:

• Lirio: ingerir hojas, pétalos o incluso beber agua del florero puede causar insuficiencia renal en menos de tres días. Los síntomas incluyen babeo, náuseas y pérdida de apetito.
• Eucalipto: sus aceites esenciales son altamente tóxicos, ya que los gatos carecen de las enzimas hepáticas necesarias para procesarlos.
• Laurel: contiene eugenol y aceites que pueden provocar trastornos digestivos y obstrucciones estomacales.
• Ficus: su ingesta suele causar náuseas, vómitos y malestar estomacal.
• Hortensia: al comer hojas o flores, el gato puede sufrir falta de coordinación, vómitos y malestar general.

Por qué los gatos muerden plantas

Los gatos suelen morder plantas por curiosidad, aburrimiento o juego, sin distinguir cuáles son seguras. Por eso, antes de decorar el hogar con nuevas especies, es recomendable consultar cuáles son aptas para mascotas y elegir opciones no tóxicas, como la hierba gatera o el pasto para gatos, que además los ayudan a purgarse de manera natural.

Qué hacer si tu gato se intoxica

Ante cualquier sospecha de intoxicación, actuá de inmediato. Los principales síntomas son:

• Salivación excesiva
• Vómitos o diarrea
• Temblores
• Dificultad para respirar
• Decaimiento o descoordinación

En esos casos, acudí de urgencia al veterinario y, si es posible, llevá una muestra de la planta ingerida. Identificar la especie ayudará al profesional a aplicar el tratamiento adecuado y puede ser determinante para salvar la vida del animal.