En Shangai una mujer solo identificada con el seudónimo Yu Hong descubrió después de 20 años de matrimonio que su esposo, Qin Lan, tenía una fortuna de 100 millones de yuanes (Mas de 3300 millones de pesos).

Durante todo ese tiempo, Yu Hong se dedicó a tiempo completo a las labores del hogar, mientras que su esposo se encargaba de los negocios. Pero lo curioso es que ella tenía que llamarlo regularmente para pedir dinero para los gastos familiares. Su esposo nunca mostró interés por nada más en el hogar. Muchas personas incluso pensaban que Yu Hong era la niñera de la familia de Qin Lan.

Cansada de ser ama de casa y tener que recordarle cada mes a su esposo los gastos, Yu Hong solicitó el divorcio a mediados de 2022. Cuando el juez les preguntó sobre sus activos, Yu Hong se sintió confundida. Después de años de matrimonio, ella no tenía idea de cuántos bienes tenía su esposo, por lo que pidió al tribunal que investigara.

En un reciente juicio en la ciudad de Shanghái, Qin Lan argumentó que sus activos no tenían nada que ver con Yu Hong. "Yo construí mi riqueza con mis propias manos. Ella solo era una ama de casa que no trabajaba", dijo Qin Lan. Además, mencionó que los activos que planeaba donar a su hija en común con Yu Hong tenían un valor mayor que las propiedades que había dado a su hija por separado.

Sin embargo, el tribunal determinó que Yu Hong tenía derechos legales sobre esos activos compartidos. El tribunal dictaminó que la acción de transferir las 18 propiedades comerciales a su hija por separado era inválida y solicitó que la joven devolviera todos los bienes que había recibido de su padre.

Fuentes con conocimiento de los procedimientos judiciales en China explicaron que la legislación de ese país establece que los esposos deben contribuir de manera equitativa a los bienes matrimoniales. Durante el matrimonio, si una de las partes regala o vende los bienes comunes sin el consentimiento del otro, dicha transferencia de propiedad queda invalidada. Después del divorcio, si se descubre este tipo de comportamiento, se puede presentar una demanda para solicitar la división de los bienes.

Esta historia ha recibido atención y ha generado un debate animado en las redes sociales chinas. "Las mujeres son como niñeras gratuitas, no amas de casa a tiempo completo", "Las mujeres no deberían ser amas de casa, deberían tener su propia carrera, ser financieramente independientes y tener el coraje de tomar el control de sus vidas", "¿Cómo es posible estar casado durante 20 años y no saber que tu esposo es un millonario? ¿Qué tipo de novela se atrevería a escribir eso?", comentaron los usuarios en línea.