El truco definitivo para aprovechar las sobras de Nochebuena en Navidad

El 24 de diciembre suele ser una fecha marcada por mesas abundantes y platos en exceso. Si bien la comida es protagonista de la Nochebuena, muchas veces esa abundancia termina convirtiéndose en desperdicio. Por eso, aplicar algunos trucos simples de organización y reutilización puede marcar la diferencia para aprovechar las sobras en Navidad.

Especialistas en consumo responsable coinciden en que una mejor planificación previa y decisiones conscientes durante la cena ayudan a reducir notablemente la cantidad de comida que se tira.

Cómo gestionar mejor la comida entre Nochebuena y Navidad

El primer paso es planificar la compra. Antes de ir al supermercado conviene definir cuántas personas participarán de la cena y qué platos serán realmente necesarios. Revisar fechas de vencimiento, evitar compras impulsivas y no duplicar preparaciones similares son claves para no acumular alimentos de más.

Otra recomendación es armar un menú más acotado. En lugar de ofrecer muchas opciones, se sugiere priorizar algunos platos centrales y acompañamientos livianos. De esta manera, todos pueden disfrutar sin caer en porciones excesivas que luego terminan en la heladera.

Ideas prácticas para reutilizar las sobras

• Carnes frías: el pollo, el cerdo o la carne asada pueden transformarse en rellenos para tartas, empanadas, wraps o ensaladas completas.
• Verduras cocidas: son ideales para tortillas, salteados, purés o budines salados.
• Arroces y ensaladas: se pueden reciclar en croquetas, salpicones o bowls fríos para el almuerzo del 25.
• Pan y facturas: si sobran, se pueden freezar o reutilizar para tostadas, budines o postres simples.

Un punto clave es guardar correctamente los alimentos, en recipientes herméticos y rotulados con fecha, para garantizar su seguridad y conservación.

Controlar las cantidades, reutilizar de forma creativa y pensar la Navidad como dos comidas conectadas (24 y 25) ayuda a reducir el desperdicio y también el gasto. Con pequeños ajustes, es posible disfrutar de las Fiestas sin excesos y con una mirada más consciente sobre el consumo.