Cómo ganar espacio en la cocina sin tener alacena: trucos simples para mantener todo ordenado
No hace falta una gran remodelación: con ideas funcionales y estéticas, podés aprovechar cada rincón y lograr una cocina práctica, organizada y con estilo.
:format(webp):quality(40)/https://radiorafaelacdn.eleco.com.ar/media/2025/10/_9.jpeg)
Tener una cocina sin alacena puede parecer un desafío, pero con un poco de creatividad es posible mantener el orden y optimizar el espacio sin renunciar al diseño. Los organizadores modulares, los estantes flotantes y los muebles móviles se vuelven aliados indispensables para aprovechar cada centímetro disponible.
1. Aprovechá las paredes al máximo
Las paredes son clave cuando no hay alacenas. Colocar estantes flotantes o repisas abiertas permite guardar vajilla, frascos o especias, y además aporta un toque moderno al ambiente.
Otra opción práctica es sumar barras metálicas con ganchos para colgar utensilios, tazas o sartenes, liberando espacio en cajones y mesadas.
2. Incorporá canastos y cajas apilables
Los organizadores de mimbre, acrílico o madera son ideales para almacenar alimentos, condimentos o productos de limpieza. Pueden colocarse dentro de los muebles bajos o sobre las mesadas.
Si los rotulás, vas a tener todo identificado y a la vista sin perder tiempo buscando.
3. Usá estanterías móviles o carritos auxiliares
Un carrito con ruedas puede funcionar como una alacena portátil. Elegí uno con varios niveles para guardar alimentos no perecederos, botellas o pequeños electrodomésticos.
Lo mejor: podés moverlo según tus necesidades, optimizando la distribución del espacio.
4. Aprovechá el espacio sobre la heladera o el horno
Los sectores altos suelen quedar vacíos. Podés colocar canastos o cajas decorativas sobre la heladera o el horno para guardar elementos que no usás con frecuencia.
Eso sí, asegurate de que el calor no afecte los materiales si están cerca del horno.
5. Colgá utensilios, tablas y coladores
Liberá cajones y mesadas utilizando ganchos o rieles para colgar tablas de madera, cucharones o coladores. También podés usar barras magnéticas para los cuchillos.
Además de funcional, esta idea aporta un toque rústico y cálido.
6. Aprovechá el interior de las puertas
El reverso de las puertas de los muebles bajos puede transformarse en un espacio útil. Con rejillas, ganchos o pequeños organizadores, podés guardar tapas, repasadores o bolsas reutilizables.
7. Sumá elementos decorativos y funcionales
No todo tiene que estar oculto. Los frascos de vidrio con pastas, legumbres o cereales pueden decorar y, al mismo tiempo, mantener el orden.
Elegí envases del mismo estilo para lograr una estética uniforme y limpia.
Un espacio ordenado y con personalidad
No tener alacena no implica resignar comodidad. Con planificación y muebles multifunción, podés crear una cocina organizada, práctica y visualmente armoniosa.
La clave está en aprovechar la verticalidad, mantener una distribución inteligente y sumar elementos que combinen diseño y utilidad.

Para comentar, debés estar registradoPor favor, iniciá sesión