En barrio Santa Rosa de Lima, dos pitbulls atacaron a una niña y a su abuela. La pequeña pelea por su vida en el Hospital Orlando Alassia, mientras que la abuela sufrió graves heridas en el rostro. ¿Cuáles pueden ser las consecuencias penales o civiles para los propietarios de los animales?
El ataque de perros pitbull a una niña y a su abuela en barrio Santa Rosa de Lima, en la ciudad de Santa Fe, no fue un hecho aislado. Mientras la pequeña lucha por sobrevivir en el Hospital Orlando Alassia, la abuela se recupera de las graves heridas que sufrió en sus brazos y en el rostro.
Los dueños o cuidadores de animales que, como en este caso, atacan a personas, provocan heridas y ponen en riesgo sus vidas; se enfrentan a posibles consecuencias en la Justicia penal y también en la Justicia civil.
El abogado penalista Néstor Oroño, docente en la Universidad Católica de Santa Fe, explicó cuáles pueden ser estas consecuencias y de qué depende la gravedad de las posibles sanciones.
En caso de ocasionar lesiones, pueden ser leves, graves o gravísimas. Eso depende de las secuelas y la Justicia decide a partir de criterios médicos. Las lesiones leves se producen cuando la víctima sufre una incapacidad laboral de hasta 30 días; las lesiones graves, cuando se produce la debilitación de un órgano o función corporal; mientras que las lesiones gravísimas se dan cuando existe la pérdida de un órgano o función
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En el caso de Santa Rosa de Lima, la dueña de los perros dijo públicamente que ella misma había sido atacada por estos animales. "A mí también me mordió, tengo dos suturasen la cabeza. Pedí si me lo podían sacar de mi casa, pero me dijeron que no se podía porque es un perro de hogar".
Pero existe otra posibilidad y es que la víctima del ataque de los animales pierda la vida. En este caso, las consecuencias penales para el dueño o cuidador del perro se agravan, ya que puede ser imputado y condenado por el delito de homicidio.
¿Qué penas puede sufrir el dueño de un perro que ataca a una persona?
Oroño indicó que, si se produce una condena por homicidio culposo, el responsable puede recibir una pena de 1 a 5 años de cárcel, de cumplimiento condicional.
Sin embargo, si la Justicia considera que se trató de un homicidio doloso, la pena mínima es de 8 años de prisión de cumplimiento efectivo.
A nivel mundial existe un caso, ocurrido en Alemania, que se toma como referencia, cuando dos perros mataros a dos niños de un jardín de infantes y el propietario resultó condenado por doble homicidio con dolo eventual.
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En Argentina existe otro hecho reciente en el que el dueño de los animales terminó en la cárcel: fue en provincia de Buenos Aires, cuando en 2017 el dueño de un perro que ocasionó la muerte de una persona resultó condenado a 8 años de prisión efectiva, al ser encontrado culpable del delito de homicidio doloso.
Más allá de las consecuencias en materia penal que puede sufrir el propietario de un animal que ataca, también debe hacerse responsable en materia civil a través de un resarcimiento patrimonial por los daños ocasionados a la víctima.
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