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ESPECTACULOS

Segundo round: Emilia Mernes intimó a otra emprendedora, esta vez por vender brillitos

Emilia Mernes y su equipo legal están intimando emprendedores que usan su nombre o imagen, una movida polémica que los fans criticaron.

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Nuevamente, la cantante Emilia Mernes se encuentra en el centro de la polémica por la acción de su equipo legal. En esta ocasión, los emprendedores detrás de la tienda Gigi Store recibió una intimación para que dejara de vender brillitos similares a los que usa la artista, por considerar que se infringe su imagen.

Gigi Store, un emprendimiento de San Miguel, vendía estos productos bajo el nombre “brillitos Emilia”, pero tras la intimación, se vio obligada a cambiar el nombre. La dueña del local, indignada, compartió la situación en sus redes sociales.

La emprendedora asegura que no busca lucrar con la imagen de Mernes, sino que simplemente ofrece un producto que tiene demanda entre sus clientes. Además, argumenta que la cantante no tiene la propiedad intelectual sobre los brillitos, ya que son un producto genérico.

El equipo legal de Emilia intimó a un emprendimiento por vender
El equipo legal de Emilia intimó a un emprendimiento por vender "brillitos Emilia".

Las redes sociales se incendiaron con opiniones divididas. Algunos usuarios criticaron a Mernes por perseguir a pequeños emprendedores, mientras que otros la defendieron, argumentando que tiene derecho a proteger su imagen.

Lo que llama la atención es que hace dos meses, Mernes colaboró con la revista Vogue, donde mostró cómo se coloca los brillitos.

Es importante destacar que la ley de propiedad intelectual en Argentina protege el derecho de los artistas a controlar el uso de su imagen. Sin embargo, este derecho no es absoluto y existen excepciones. En este caso, podría argumentarse que la tienda Gigi Store no está infringiendo la imagen de Mernes, ya que los brillitos son un producto genérico.

Sin embargo, el hecho de que Emilia vende su propia línea de brillitos puede ser la razón detrás de la intimación, que exigía un cambio de nombre del producto.

El caso aún está en curso y no se sabe cómo se resolverá. Sin embargo, ha generado un debate importante sobre el derecho de los artistas a controlar su imagen y el derecho de los emprendedores a ofrecer productos que tienen demanda entre sus clientes.

FUENTE: AIRE DIGITAL

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