Juan Francisco Moro no pudo evitar emocionarse hasta las lágrimas al escuchar una pregunta especial que le hizo la conductora.
En una noche donde las emociones pegaron directo en el corazón de cada participante de MasterChef, Juan Francisco Moro no pudo evitar quebrar en llanto al escuchar una pregunta de Wanda Nara, ante la atenta mirada de sus compañeros y los jurados Damián Betular, Donato de Santis y Germán Martitegui.
Tras los elogios de los chefs en el desafío que consistió en hacer las milanesas que comía de pequeño, el concursante se sinceró: “Intenté transportarme a ese momento en el que nos sentábamos con mi vieja, mis dos hermanos y mis dos abuelos (los papás de mi mamá) cuando nos íbamos a Miramar, a una casa que nos prestaban”, expresó, Y agregó: “Mis dos abuelos no están más, por suerte mi vieja, sí. Nosotros nos criamos con ellos, mi vieja siempre laburó”.
Fue entonces que, ante la consulta de la conductora del programa de Telefe sobre si quería decirle algo especial a su mamá, el joven no contuvo las lágrimas: “No quiero que digan que después lloro por lo que fuera, pero mi vieja es lo más grande que hay. Desde que yo tengo un año, ella se quedó sola, con mi hermano de 8 años; y mi otro hermano, de 3”.
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“¿Qué le puedo decir? Que la quiero un montón. Me cuesta mucho ser cariñoso con ella, pero la amo un montón. Gracias por todo lo que dio por nosotros tres”, cerró Juan Francisco, a flor de piel, previo a recibir el apoyo y la contención del resto del grupo.
Si bien cada gala de MasterChef está cargada de adrenalina, nervios y muchas emociones, los participantes vivieron un momento más que especial en el desafío que propusieron Damián Betular, Donato de Santis y Germán Martitegui en el programa que conduce Wanda Nara por Telefe, al pedirles que prepararen las milanesas que comían en su infancia.
“Encontré mis raíces”, atinó a decir Rodolfo Vera Calderón, al ver el cartel de su natal Guanajuato (México). Lo mismo pasó con Antonio López, oriundo de La Merced (Salta): “Viví toda mi vida ahí y me pone muy contento que se esté viendo para todo el país de dónde soy”, expresó, con la voz quebrada.
A su turno, Daniela Kompel también habló de Palermo (Capital Federal), el lugar donde creció: “Soy fanática de mi barrio y estoy orgullosa”. Y Juan Francisco Moro continuó: “Mi cartel es de Sáenz Peña (Buenos Aires)”.
Rodrigo Salcedo no se quedó atrás y mostró el cartel de Río Cuarto (Córdoba): “Me gustaba mucho explorar, era medio un ‘indio’. Mi vieja me tenía bastante cortito y me controlaba de cerca. Y Juan Ignacio Feibelmann, que nació en Rosario (Santa Fe) cerró, a corazón abierto: “La ciudad del fútbol, como le dicen, por cómo se vive. Estoy re contento. ¡Rosario, papá!”.
Notifé.
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