En paralelo al juicio abreviado tramita la causa civil por daños y perjuicios, que aún se encuentra abierta.

Los jóvenes que atacaron a Tiziano Gravier, hijo de Valeria Mazza y Alejandro Gravier, serán condenados en Rosario a través de un juicio abreviado.

Este miércoles a las 15 horas, se hará una audiencia en el Centro de Justicia Penal ante el juez penal de primera instancia, José Luis Suárez, para homologar el procedimiento abreviado.

El objetivo es que los acusados recuperen la libertad después de la resolución, ya que se encuentran en prisión preventiva efectiva por 90 días, después de la imputación hecha el 10 de junio por el fiscal de Flagrancia Rodrigo Santana.

Según el acuerdo al que llegó la defensa, la querella y el Ministerio Público de la Acusación, Jesuán Ezequiel Monzón y Franco Ezequiel Zampini recibirán la pena de 3 años de prisión de ejecución condicional.

La medida fue tomada en base a la agresión y los golpes, que dejaron a la Gravier con fractura de mandíbula con desplazamiento y por lo que tuvo que ser sometido a varias cirugías.

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La golpiza ocurrió en la madrugada del 5 de junio pasado en la puerta de un boliche del barrio Pichincha de Rosario, exactamente hace un mes.

Como condición del acuerdo, además, Monzón y Zampini, de 26 y 27 años respectivamente, deberán hacer un curso en el INADI por discriminación. A su vez, tendrán que estar a disposición para acciones estatales o campañas anti discriminación.

Los agresores, dentro de las reglas de conductas acordadas entre las partes, durante cuatro años no podrán asistir a boliches, consumir alcohol, acercarse o comunicarse con la víctima. En caso de incumplir alguna de las pautas, el fiscal o la querella podrán pedir nuevamente el arresto de ambos.

Los acusados se disculparon al momento de ser imputados por el fiscal. El defensor de ambos, Jorge Bedouret, enfatizó que previo a los ataques hubo un supuesto "intercambio de palabras en tono burlón", algo que fue rechazado por la querella y la familia de la víctima.

Monzón y Zampini, horas después de los procedimientos policiales, se entregaron ante el Ministerio Público de la Acusación. Su abogado, en ese momento, dijo: “No entienden muy bien por qué llegaron a una situación así. Dicen que habían tomado algo, pero no estaban borrachos ni mucho menos”.