Fabiana Cantilo apuntó contra L-Gante y defendió a Lali: “No me importa, no le entiendo”

En el estreno de su película Lágrimas de fuego, basada en una idea propia y dirigida por Gabriel Grieco, Fabiana Cantilo dialogó con el ciclo Los profesionales (El Nueve) sobre su nueva faceta cinematográfica y dejó fuertes declaraciones sobre la música actual.

La artista, con su estilo frontal, destacó a Lali Espósito como referente de rebeldía, pero fue lapidaria con L-Gante:

“Lali peló rock y rebeldía, mi amor. La obligaban a actuar de monja y a ella no le gustaba, pobrecita. A L-Gante no le entiendo. Sí me gusta Ca7riel & Paco Amoroso, también Trueno y Wos, pero de L-Gante no me preguntes porque no tengo ni idea qué hace”.

Consultada sobre si la dificultad pasaba por las letras o la música, Cantilo redobló la apuesta:

“Nada le entiendo. No me preguntes más por él. Es un problema. Son los errores de la vida. No me importa L-Gante”.

Incluso lo comparó con Wanda Nara, que recientemente lanzó su carrera como cantante:

“A Wanda no la escuché, no sabe, no contesta. Igual Wanda es mejor que L-Gante, si vamos a decir algo. Pero no me pregunten por esa gente porque no quiero hablar porque no le entiendo”.

Contra el reggaetón y la falta de originalidad

Al ser consultada por Damas Gratis, Cantilo se mostró risueña pero firme:

“¿Me vas a seguir preguntando por la cumbia? Te voy a cagar a trompadas. Sabés qué pasa, no me gustan las cosas que no son originales. ¡Basta del reggaetón! ¿No pueden inventar algo nuevo? ¿Qué onda con la repetición y la máquina de hacer chorizos? Nunca en la vida, never repeat. No repetition”.

La intérprete de Mi enfermedad y Mary Poppins y el deshollinador insistió en que siempre buscó evitar repetirse y valoró la innovación por encima de las fórmulas del mercado.

La visión de Fito Páez

Las palabras de Cantilo se suman a las que pronunció meses atrás su amigo y expareja Fito Páez, quien en Futurock cuestionó la supremacía de ciertos géneros y el empobrecimiento musical:

“Esa música de una sola nota es la que está generando el puto mercado, a mí me aburre. Se llevaron puesta la melodía y la armonía. Quedó solo el ritmo, y ni siquiera entramos en las letras que, mamita...”.

El rosarino también vinculó la discusión con el feminismo y envió un mensaje a las artistas:

“Si van a bailar eso, sepan, sobre todo las chicas colegas, que están peleando una cosa y después están bailando otra”.

Para Páez, la riqueza de la música bailable está en su diversidad: “Se puede bailar a Prince, García, Spinetta, Chico Buarque, Aretha Franklin. Pero si decidís bailar esa que te van a perrear toda la noche, es problema tuyo”.

Finalmente, advirtió sobre la coherencia entre arte y militancia:

“Cuando vayas a defender los derechos al Congreso, no me pidas que te apoye más. Los movimientos que no generan estéticas, manifiestos u obras, se caen o están flojos de papeles”.