Hubo cruce entre ambos bandos y se registraron roturas de locales en Montevideo. También se originaron problemas con la policía en el ingreso al Estadio Gran Parque Central.
El ingreso de los hinchas de Boca Juniors al estadio de Nacional fue una pesadilla. Los simpatizantes xeneizes sufrieron maltratos, golpes y represión policial en un desordenado y caótico protocolo de entrada al Gran Parque Central, para el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
Los uniformados atacaron con balas de goma y gases lacrimógenos a los argentinos que se acercaron hasta el escenario de Montevideo para ver al equipo de Jorge Almirón. Los incidentes se generaron minutos previos al inicio del encuentro en las calles aledañas al estadio.
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En un descontrolado acceso, la policía montada golpeó a los hinchas que pasaban el filtro antes de presentar el código QR con la entrada correspondiente. Hubo empujones, gases y balas de goma.
La represión policial provocó varios heridos y quejas de los socios y socias de Boca Juniors, que llegaban hasta el último control con las manos en alto, mostrando su DNI y celular en ademán de temor a que las fuerzas de seguridad los ataque brutal e innecesariamente como lo hicieron durante gran parte de la jornada.
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