El duro golpe del ACV a la “Locomotora” Oliveras: diagnóstico crítico e irreversible
Pasada más de una semana desde el ACV isquémico que sufrió Alejandra “Locomotora” Oliveras, su hermano Jesús confirmó que el daño en el tronco encefálico es irreversible y que la vida de la exboxeadora depende de un respirador. El panorama tiñe de incertidumbre la salud de una figura férrea del deporte y la política santafesina.
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El martes 22 de julio, Jesús Oliveras rompió el silencio en TN y A24. “En el último parte médico hay daño irreversible en el tronco encefálico. Y eso es irreversible. La vida de Alejandra depende de un respirador”, explicó con la voz quebrada.
El TCP Néstor Carrizo, jefe de terapia intensiva del Cullen, coincidió: hay lesión neurológica grave, riesgo vital alto y dependiente de asistencia respiratoria mecánica.
La familia en vilo
Jesús describió el clima emocional de los hijos: “Están pasando por negación, ira, bronca, tristeza… eran una sola unidad” . Además, relató el impacto de las conversaciones con médicos, donde la cruda realidad fue más que evidente. Sin esperanza inmediata, la familia se aferra al día a día
Contexto clínico y evolución
La exboxeadora sufrió el ACV el lunes 14 de julio. Fue trasladada al Cullen en Rosario, donde debió someterse a craneotomía descompresiva por un edema cerebral
A casi una semana, Carrizo explicó que la lesión se originó en la arteria silviana, afectando funciones vitales: respiración, tensión arterial y reflejos básicos
Aunque estabilizaron signos vitales y evitaron la muerte encefálica, la intervención no pudo revertir la gravedad del daño.
Un mensaje de fortaleza
La emotividad se asoma en cada palabra de Jesús: “Ella siempre fue una persona muy sana… la verdad no lo entiendo”. Esa incredulidad se mezcla con gratitud: “Gracias a todos los que están rezando, el cariño es inmenso
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