Del corazón de 9 de Julio al histórico ascenso con Atlético: la vida de Walter Gómez y el fútbol que "le tocó"

Walter Gómez es una voz autorizada en el fútbol rafaelino. No solo por su condición de referente histórico de 9 de Julio, sino también por haber sido parte fundamental de uno de los planteles más recordados de Atlético de Rafaela, aquel que logró el ansiado ascenso en 1988.

A través de su memoria, revivió -frente al micrófono de Radio Rafaela- una época dorada del fútbol regional, en la que el talento se valoraba por encima del rigor físico.

“Antes el fútbol era realmente muy lindo. No había mucha fricción, pero sí muy buenos jugadores”, recordó. “Primero lo que hacían era capitalizar al buen jugador, con buen pie, con buena pegada, inteligente. Después venía la parte física. Era completamente distinto”, agregó.

De General Pinedo a Rafaela: el viaje de un pibe con talento

Antes de su desembarco definitivo en Rafaela, Walter ya había dejado huella en otras ligas del interior. “Yo jugaba en Unión de General Pinedo.  Habíamos jugado el Torneo Nacional”, contó . Pertenecía a Atlético Charata, pero fue cedido a préstamo para disputar el certamen con Libertad, un equipo armado exclusivamente para competir en el Torneo del Interior. “Anduvimos muy bien, estuvimos muy cerquita de ganarlo. Nos cruzamos con varios equipos importantes de la zona”, dijo.

En plena juventud, las oportunidades no tardaron en aparecer. “Tenía varias propuestas para irme. Gimnasia de La Plata, Sarmiento de Junín... te aclaro que tenía 19 años, un pibe total”, recuerda.

El llamado de 9 de Julio y la tentación del ascenso

Pese a los ofrecimientos de clubes de peso, su corazón empezó a inclinarse hacia Rafaela gracias a tres nombres que lo convencieron:  “Paco” Gerold , Minetti y Vallejo. “Ellos ya habían jugado en el ‘85 en 9 de Julio y me dijeron: ‘Venite con nosotros a Rafaela, que vamos a armar un equipo para ascender, para ganar’”, relató Walter. Así, dio el paso que lo llevaría a vivir una de las etapas más importantes de su carrera.

Atlético de Rafaela y el ascenso inolvidable del ‘86

En esa misma época, Atlético de Rafaela comenzaba a delinear el equipo que lograría el ascenso en 1988. El entrenador Reynaldo Volken se fijó en Gómez tras un partido clave. “Habíamos jugado contra el equipo de Lechuga (Central Norte), y Lechuga —que nunca perdía tiempo— le habló de varios jugadores a Volken. Supuestamente él habló de mí, y Volken fue a ver el partido”.

La actuación de Walter fue destacada, pero el técnico no quedó del todo convencido. “Cuando volvió, en los medios de comunicación, en esta misma radio, dijo que yo era buen jugador, pero que en esta liga me iba a costar mucho. Que era muy livianito para jugar acá”, recordó entre risas. Y remata con ironía: “Menos mal…”

Aquella camada de jugadores que integraron el plantel del ascenso de Atlético fue recordada por su calidad y profesionalismo. “Uno veía esa imagen del plantel del ‘86 y no había puntos bajos. Todos jugaban en primera división, todos profesionales, todos de un metrio y medio hacia arriba”, aseguró.

Para Walter, era otra época del fútbol. Una época en la que se valoraba la técnica y la inteligencia dentro de la cancha. “Ahora es distinto”, concluyó, con cierta nostalgia, pero con el orgullo intacto de haber sido parte de una historia grande en dos instituciones emblemáticas de Rafaela.