El futbolista aseguró que tuvo sexo consentido en el baño de la discoteca Sutton y que la víctima llevó la iniciativa.La sentencia se conocerá en 15 días aproximadamente.
El futbolista brasileño Dani Alves negó este miércoles que violase a una mujer en una discoteca de Barcelona y aseguró que la presunta víctima era libre de irse "en cualquier momento", durante su declaración en la última jornada del juicio en su contra en la ciudad española.
"Podía salir en cualquier momento, no estaba obligada a estar allí", declaró Alves sobre su presunta víctima, asegurando que no es "un hombre violento", y respondiendo solamente a su abogada durante una breve declaración de 20 minutos.
"En ningún momento me dijo nada", insistió el futbolista brasileño de 40 años, que lleva más de un año en prisión preventiva por estos hechos.
La declaración de Alves dio paso a las conclusiones finales de este juicio que ha despertado gran atención mediática.
La sesión del miércoles arrancó con el testimonio de especialistas que atendieron a la supuesta víctima, como una psicóloga forense que sí consideró que la joven presentaba síntomas de un "cuadro postraumático" cuando la examinó meses después.
También comparecieron otros expertos propuestos por la defensa de Alves, que señalaron que su estado de ansiedad posterior podría derivar también de otros factores, como el impacto mediático del caso.
La estrategia de la defensa de Dani Alves: demostrar que iba borracho para rebajar su pena de 9 a 3 años de cárcel.El consumo de alcohol como atenuante. Si logran demostrarlo, con datos objetivos, recordemos que no hay análisis, sólo testigos, podría conseguir un atenuante simple.Los testimonios del entorno de Alves, de su lado, coincidieron en resaltar que el futbolista había bebido mucho aquella noche.
Tras la declaración del futbolista y los informes finales, el juicio concluirá, a la espera de una sentencia que se puede demorar semanas.
Fiscalia pide para el jugador una pena de nueve años de prisión, además del pago de una indemnización de 150.000 euros (unos 162.000 dólares) a la mujer y otra década de libertad vigilada tras cumplir la condena.(El País)
Comentarios