Fue atrapado y poco después terminó nuevamente con sus progenitores por orden de la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia.
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Este jueves, en primera persona, los efectivos de Subcomisaria 1° vieron a un menor arrojando un elemento contundente sobre la luneta de un móvil policial. Afortunadamente, no produjo ningún daño y se dio a la fuga de inmediato corriendo por calle Francia al Norte.
El joven no desistió y volvió unos cinco minutos después con el mismo propósito en mente. Los efectivos volvieron a verlo detrás del mismo móvil y arrojando otro elemento sobre la luneta. Esta vez, logró destrozarla por completo.
Los efectivos de Agrupación Cuerpo también fueron testigos de esta escena, mientras se encontraban apostados en la intersección de calles J. V. González y Zaffetti. Enseguida informaron lo sucedido a todas las unidades, e indicaron que el joven se escapó por calle Francia hacia el Norte.
En la recorrida, los efectivos pudieron detectar que el menor ingresó a una casa de calle España al 3100. En ese domicilio, se produjo la identificación y detención preventiva, trasladándolo a sede policial en calidad de resguardo ya que la policía comenzó a recibir agresiones de los vecinos en el lugar del operativo.
El personal policial convocó a la dependencia a personal del Departamento Científico Forense de la PDI Región 5 y procedió, además, al secuestro de dos piedras. De lo sucedido, dieron conocimiento a la Subsecretaria de Niñez, Adolescencia y Familia, quien dispuso que el menor sea entregado a sus progenitores.