La inspectora María Laura Malagueño le realizó maniobras de RCP. Una vez asistida en el Samco la beba fue derivada al Hospital de Niños donde después de 5 horas despertó sin secuelas.
Durante la tarde del sábado, la rápida intervención de la inspectora María Laura Malagueño, de la Unidad Especial Casa de Gobierno, salvó la vida de una bebé de un año y cuatro meses en Santo Tomé. El dramático episodio ocurrió en una vivienda de calle Hugo Wats al 1900.
Malagueño, que estaba en su día libre, escuchó fuertes golpes en la puerta de su casa y, al salir, vio a los padres de la pequeña en estado de shock. "Vi que la abuela traía a la bebé desvanecida, mojada y boca abajo. Me la entregó, y comencé maniobras de RCP en mis brazos. La nena hizo una bocanada, pero con mucha dificultad", relató la agente a El Litoral.
Contra el tiempo
Consciente de la gravedad de la situación, Malagueño tomó las llaves de su auto y trasladó a la pequeña al Samco de Santo Tomé, ubicado a unas pocas cuadras. "La mamá quería ir al Hospital de Niños, pero le dije que era demasiado tiempo; la bebé necesitaba oxígeno de inmediato", explicó.
Al llegar al Samco, la menor fue atendida por tres enfermeras que continuaron con la reanimación. Momentos después, fue derivada al Hospital de Niños Orlando Alassia, donde permaneció cinco horas bajo observación. La pequeña despertó sin secuelas, aunque se detectó un leve edema por el tiempo que estuvo bajo el agua.
"La capacitación salvó su vida"
La inspectora atribuyó el éxito del rescate a las capacitaciones de primeros auxilios que recibió durante su carrera. "La verdad que esas capacitaciones que recibimos son fundamentales. Esas prácticas con muñequitos, que a veces parecen tontas, hicieron la diferencia. En este caso, el tiempo valía oro".
La familia de la bebé, aún conmocionada, agradeció el gesto heroico de la policía, quien incluso volvió a la casa para buscar ropa para la madre y la pequeña. "Dios me puso en el camino de esta bebé para ayudarla", reflexionó.
Fuente: El Litoral