El líder de La Libertad Avanza fue al estacionamiento del estudio desde donde sale el ciclo de América, pero cuando el conductor se acercó para saludarlo se negó a bajarse del vehículo. Mirá el video
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En la noche del martes, duranteBailando 2023, Fátima Florez se presentó con una imitación de Carmen Barbieri. Enfundada en un vestido largo azul con brillos, la humorista hizo una performance como si fuera la madre de Federico Bal. En un diálogo cómico conMarcelo Tinelliy con parte del jurado, como Moria Casán y Marcelo Polino, el personaje de Carmen que imitaba Fátima hizo picantes declaraciones. “Moria, estás muy calladita hoy, ¿es porque estoy yo?”, disparó a la One, ante la risa de todo el público.
Después le preguntó a Paula Chaves, quien estaba en reemplazo de Carolina Ardohain en el jurado si estaba compitiendo con Marcelo Polino por el vestido que tenía un moño gigante. “Le querés robar protagonismo”, le dijo. Acto seguido, mientras Fátima continuó con su show, Tinelli exclamó: “Por favor, espérenme un minuto, que la cámara me siga”, y salió del estudio rumbo al estacionamiento.
Allí se pudo ver varios autos estacionados junto a una ambulancia. Adentro de uno de los vehículos, de color negro, Marcelo visualizó a Javier Milei, sentado adentro tras los vidrios polarizados. “Perdón, buenas noches, ¿puede bajar el vidrio?, ¿es el candidato presidencial? ¿Puedo abrir la puerta?, preguntó el conductor de ShowMatch colocando el micrófono por el espacio diminuto que estaba abierto por la ventana.
Sin embargo, el candidato presidencial de La Libertad Avanza no se movió del automóvil. “¿No me ves?”, le respondió. “Sí, te veo pero te veo poco, quiero saber si usted es el candidato presidencial Javier Milei”, dijo directamente Marcelo para entablar un diálogo por primera vez con el candidato. “Sí, efectivamente soy Javier Milei”, respondió.
Entonces el conductor intentó por todos los medios que Milei se baje del auto y se encuentre con Fátima. “¿No puede venir un minuto a ver a Carmen Barbieri?”, l preguntó en forma graciosa, haciendo alusión a su novia que estaba imitando a la conductora de Mañanísima.

La respuesta del líder del espacio político liberal fue contundente. “No, pero de vuelta, sabés que solo vine a buscar a Fátima, dale. La vine a buscar...”, sostuvo firmemente sin bajar más la ventanilla. Así que Tinelli apeló a su humor. “¿Dolarización sí?, ¿dolarización no?”, le consultó ya que en las últimas horas durante el Debate Presidencial del domingo pasado había evitado hablar del tema.
“Dolarización sí”, respondió Milei terminante. Y agregó: “Basta de inflación y que nos roben con la inflación”. Marcelo le dijo que eran vecinos del barrio. “Sí, eso ya lo sé”, dijo escuetamente el novio de Fátima Florez. “¿Puede abrir la puerta?”, insistió Tinelli, pero Milei se mantuvo firme en su negativa. “No, de hecho esto no tendría que estar pasando”.
“¡Qué lastima que no podemos tener a Fátima con Javier!”, se quejó Marcelo luego que el candidato presidencial rechazara su invitación a bajarse del auto. Entonces, le volvió a decir: “¿Me pueden llevar después a mi casa que queda a tres cuadras de la suya?”. “Pero es un auto para dos este”, respondió Javier. “¿Y no puedo ir arriba de Fátima?”, insistió el conductor. “Y... no sería lo mejor”, le dijo sin vueltas.
Entonces se acercó Fátima, vestida de Carmen Barbieri, hasta el estacionamiento. Marcelo le preguntó si podía pedirle que baje el vidrio. “¡Ay el señor es el léon y si yo soy la leona podríamos estar juntos, ¿no les parece? Que entre a rugir un poquito, pero lo vamos a dejar que esté ahí adentro”, concluyó la comediante ante la mirada de su novio desde adentro del vehículo.
“Pero que baje un poquito el vidrio y ya lo dejo, lo quiero saludar nada más”, arremetió otra vez Tinelli. Y Fátima respondió con palabras de su pareja. “Como la libertad avanza, que haga lo que él quiera, ¿no te parece?”. Entonces Tinelli hizo el último intento para poder hablar con el candidato. “¿No puede bajar el vidrio? Es un minutito nada más”.
“Dale, Marcelo es otro momento”, respondió tajante. Así que por el espacio abierto de la ventana del auto le pasó la mano para saludarlo. “Volvamos al estudio”, le dijo a Fátima ya resignado tras la negativa de Milei a bajarse del vehículo.