Así lo dijo Franco Rísolo, el talentoso tatuador de Ceres que conquistó a Rafaela y ahora se muda a México.
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En tan solo cuatro años, Franco Rísolo ha logrado consolidarse como uno de los tatuadores más reconocidos de Rafaela. Su enfoque único y artístico lo ha llevado a desarrollar un estilo propio que ha enamorado a muchos en la región.
"Para mí pasaron demasiadas cosas en este corto tiempo que considero que tatuó, que son cuatro años apenas," explicó Rísolo. Su trayectoria comenzó con un claro objetivo en mente: "llevar mi trabajo conmigo a donde sea que yo esté."
Franco se trasladó de Ceres a Rafaela para estudiar el profesorado de artes visuales. Durante ese tiempo, su pasión por el dibujo creció, permitiéndole pulir nuevas técnicas y adaptarlas al arte del tatuaje. "Todo lo que venía haciendo en papel, en lienzo y demás, lo traspase a la piel con otros lápices, con otros pinceles, pero hacer lo que amo"
Se dedicó a aprender de manera autodidacta, utilizando recursos en línea. "A mí me sirvió mucho, particularmente yo fui muy autodidacta cuando empecé a tatuar, me sirvió mucho fuente YouTube," compartió, destacando la importancia de los tutoriales y la observación detallada del trabajo de otros tatuadores.
Rísolo eligió un estilo botánico de líneas finas, inspirado en su amor por la naturaleza. "Lo que más me gustó dibujar fueron flores, hojas, ramas, todo lo que tiene que ver con la naturaleza," explicó. Este estilo se ha convertido en su sello personal y ha sido bien recibido por su clientela.
Con una creciente reputación y una clientela fiel, Franco ha decidido llevar su arte más allá de las fronteras de Argentina. "Me voy a vivir al menos un tiempo a México," anunció, explicando que su objetivo es seguir expandiendo su trabajo y moverlo a nuevos horizontes. "El objetivo es un poco esto que te decía, seguir moviéndome con mi trabajo y tiene más que ver con la expansión."
Franco valora profundamente el apoyo que ha recibido de personas de diversas ciudades, y agradece la oportunidad de haberse establecido en Rafaela. "El hecho de abrir el estudio, empezar a tatuar a gente, que esos tatuajes empiecen a moverse," dijo, destacando cómo su arte ha viajado más allá de Rafaela y ha atraído a clientes de ciudades más grandes.
Los tatuajes de Franco Rísolo no solo representan su talento, sino también su dedicación y pasión por el arte. "Mis sesiones son de entre tres y cuatro horas, que es también lo saludable para la piel," mencionó sobre su enfoque meticuloso y cuidadoso.