El caso de Oscar Jegou, que integró el seleccionado de Francia campeón mundial juvenil este año, reavivó la discusión sobre el consumo de droga en el ambiente rugbier.
En Francia, el caso de Oscar Jegou -un prometedor rugbier que dio positivo en cocaína- desató un escándalo y reavivó la discusión sobre el consumo de droga en el rugby francés. "El mundo del rugby profesional parece consciente del problema y totalmente impotente para hacerle frente”, aseguró el prestigioso diario L'Equipe en su informe sobre esta problemática. A continuación, todos los detalles.
Oscar Jegou es un jugador de 20 años que juega de tercera línea en La Rochelle, hoy uno de los mejores equipos de Europa, sino el mejor: actualmente es el bicampeón de la Copa de Campeones. Además, en julio pasado, Jegou integró el seleccionado juvenil -M20- de Francia que se consagró tricampeón del mundo en Sudáfrica. Fue una de las revelaciones del torneo.
Recientemente, dio positivo en una prueba antidoping que le hicieron el 20 de agosto, tras la derrota de su equipo en el Top 14 vs. Montpellier. Precisamente, la sustancia prohibida hallada en las muestras fue benzoilecgonina, un metabolito de la cocaína. Por supuesto, este componente forma parte de los “estimulantes no especificados” de la Agencia Francesa Antidopaje (AFLD). Según se pudo saber, el prometedor rugbier habría consumido durante una fiesta, dos días antes del mencionado partido.
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La investigación de L'Equipe
Luego de la noticia del caso Jegou, el diario publicó un informe al respecto, tal como había hecho en el 2022. Según aseguró, "el mundo del rugby profesional parece consciente del problema y totalmente impotente para hacerle frente” y “la cocaína en el rugby es una lacra, aunque las personas que entrevistamos sobre el tema insistieron en que no era un problema exclusivo del rugby”.
La investigación incluye más que interesantes testimonios, como el de Pierre Venayre, el director general de La Rochelle que se encargó del caso Jagou. “Tenemos que ser prudentes cuando hablamos de este problema, y no dar la impresión de que sólo afecta a nuestro deporte. Como club que se ocupa de los jóvenes, realmente tenemos un papel que desempeñar en términos de prevención, tenemos que estar atentos, pero no estamos abordando un problema que afecta a un deporte, estamos abordando un problema en la sociedad, y cuando abordamos un problema en la sociedad, tenemos que ser humildes porque es un tema que va más allá de los actores políticos. Es un tema complejo de entender”, aseguró.
"¿Por qué un joven jugador que lo tiene todo para triunfar consume cocaína? No es sólo un jugador joven, es un hombre joven. Puede ser una mujer joven. Tienen una vida social, relaciones e influencias. Un jugador de rugby no está por encima de la tierra. Son seres humanos con conexiones con la sociedad. Algunos jugadores tienen la tentación de desviarse. Y creo -es una opinión personal- que el período Covid tuvo un impacto psicológico en nuestros jóvenes, que estuvieron encerrados durante mucho tiempo, creando un terreno fértil para comportamientos adictivos”, comentó.
Por otro lado, Jean-Baptiste Lartigot - responsable del centro de formación Aviron Bayonnais- resumió: “Es una droga que se ha democratizado, solía ser elitista, cara... ya no es así. Su consumo afecta a todos los estratos de la sociedad y al rugby le choca porque está en los medios de comunicación. No creo que los jugadores de rugby la usen más que los demás, la usan como todo el mundo".
A su vez, Max Lafargue -médico de la Liga Nacional (francesa) de Rugby- imploró: "Es urgente dar la voz de alarma. Hay que tomarse el problema en serio, como se hizo con la conmoción cerebral, cuyos efectos sobre las neuronas son bien conocidos. Quienes lo toman regularmente no tienen ni idea de las consecuencias que puede tener para su salud".
"La cocaína circula en el campeonato francés Top 14. El consumo afecta a muchos jugadores, a los jóvenes y a los no tan jóvenes, a los muy buenos, a los internacionales y a los demás. Por la noche, para entretenerse, pero también en la práctica, durante los entrenamientos, este psicoestimulante puede ayudar a los deportistas a superar sus límites. Como recordatorio, la cocaína desaparece bastante rápidamente del organismo, entre 36 y 48 horas”, concluyó L’Equipe.
TyC Sports