El Sumo Pontífice participa en una cumbre interreligiosa. Francisco tendrá la oportunidad de verse con Vladimir Putin.
El Papa Francisco se encuentra en Nursultán, la capital de Kazajistán, en el corazón de Asia Central, para participar del Congreso de las Religiones Mundiales y Tradicionales.
Su viaje durará solo tres días. Un dato significativo es que Jorge Bergoglio se cruzará con dos grandes protagonistas de la actual crisis internacional causada por la guerra en Ucrania: Vladimir Putin, presidente de Rusia y Xi Jinping, presidente de la República Popular de China.
Durante el vuelo de seis horas desde Roma, el Papa caminó ayudándose con un bastón. Mientras saludaba a los periodistas fue consultado por un eventual encuentro con el presidente chino. Francisco le respondió que no tenía noticias del viaje de Xi Jinping a Kazajistán pero aprovechó para ratificar: "Estoy siempre listo para ir a China”.
La guerra, temática central
Francisco pronunció su primer discurso oficial de los tres que se esperan para este viaje. Definió a Kazajistán como “el país del encuentro" y se hizo portador del “grito contra la guerra” en Ucrania.
Francisco remarcó luego que "está cada día más presente la necesidad de alargar el empeño diplomático a favor del diálogo y el encuentro, porque el problema de algunos es hoy el problema de todos”.
El pontífice argentino agregó que “quien en el mundo tiene más poder tiene también más responsabilidad con los demás, especialmente en los países mayormente en crisis de lógicas conflictuales”.
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¿En qué se basa este Congreso de las Religiones?
La cita nació en 2003 con la presencia constante de la Santa Sede. Este año está centrado en el papel de los líderes en el desarrollo espiritual y social de la humanidad en el período posterior a la pandemia. Estarán presentes 108 delegaciones de 50 países del mundo. Este inmenso país lo habitan 19 millones de personas, de los cuales el 70% es musulmana y el 26% son cristianos, en su mayoría ortodoxos.