Para Radio Rafaela, Lucas relató lo sucedido. Él y su pareja fueron víctimas de un ataque premeditado que, en realidad, habría estado dirigido a otra persona.
Karen y Lucas vivieron momentos de terror en un viaje al Norte del país, que pretendía ser de vacaciones, pero terminó de la peor manera. Los jóvenes rafaelinos fueron víctimas de un atentado a su auto, un ataque presuntamente erróneo, ya que habría estado dirigido a otra persona.
En diálogo con este medio, Lucas Michelli contó los hechos de los que fueron víctimas con su novia. Todo comenzó el sábado, cuando llegaron a Libertador General San Martín, provincia de Jujuy, dispuestos a pasar unos días de vacaciones conociendo el destino.
Al llegar, salieron en búsqueda de un hotel en el que alojarse, encontrando uno sobre una avenida. Como el edificio no contaba con cochera privada, debieron dejar el auto estacionado sobre la calle. “Me dijeron que nunca pasaba nada”, confiaron. “Lo pongo sobre la avenida, en la puerta del hotel, frente a la cámara”, relató Lucas.
Vacaciones frustradas
Ya dispuestos a disfrutar la estadía en Jujuy, decidieron organizar el día domingo contratando un guía para que los acompañe de excursión. “Teníamos todo planeado, salimos a comer y a las 10pm nos acostamos a dormir”. La mala noticia llegó en la madrugada: “a las 3am nos golpean la puerta de la habitación y nos dicen que el auto se estaba incendiado. Así me desperté”.
Sin tiempo de pensar demasiado, Lucas bajó a ver lo que estaba pasando. En la calle se encontró a los vecinos que ya habían apagado el fuego, interviniendo rápidamente. Poco después, llegaron los Bomberos acompañados por la Policía.
El daño material en el interior del auto fue total. “Se incendió todo, adentro no sirve nada, está todo derretido. Cuando veo el auto no entendíamos por qué había pasado, si era algún desperfecto eléctrico o qué”, contó Lucas.
Acabo de perder un auto que no lo puedo comprar nunca más en la vida
Lucas Michelli
La duda duró muy poco. Al dar la vuelta al auto, se encontró con la ventanilla rota y una piedra en las inmediaciones. Cuando notaron esta situación, decidieron acudir a las cámaras de seguridad que registraron todo el ataque.
“Dos individuos se acercan en una motocicleta, paran en la avenida, uno se cruza caminando, rompe el vidrio de la puerta del conductor, tira una botella con nafta y la prende fuego adentro del auto. Sale corriendo, sube a la moto y se van”, contó Lucas. La moto en la que se conducían no tenía patente y, como la cámara no tiene muy buena definición, no se reconocen los rostros de los sujetos.
¿Un ataque por error?
Una vez sofocado el fuego y finalizados los trabajos en el vehículo, Lucas tuvo que dirigirse a comisaría para realizar la denuncia mientras su novia se quedó con el auto, un Honda Civic. Otra sorpresa llegó algunos minutos más tarde.
Aproximadamente a las 4am, se hizo presente en el sector del hotel un masculino a bordo de un Honda City del mismo color y similares características al auto incendiado. “Era igual, lo único que cambia es el modelo”, contó Lucas.
“Él se había enterado del incendio, estuvo parado mientras estuvo la policía y los bomberos. Cuando se fueron todos, el hombre se bajó para pedir las cámaras de seguridad del hotel para ver si reconocía a los que prendieron fuego el auto. A él lo habían amenazado en la plaza a la tarde de muerte y que le iban a prender fuego el auto por un problema con otro tipo”, relató Lucas.
Vine a vacacionar, a pasarla bien, y me voy hecho mierda. La policía muy lerda, muy mal. Es muy grande el grado de inoperancia
Lucas Michelli
Este hecho encendió todas las alarmas y despertó muchas sospechas. Se presume que el ataque fue por error al auto de los jóvenes rafaelinos, ya que habría estado dirigido a este masculino de identidad desconocida. Además, algunos vecinos del sector se animaron a especular que el ataque podría responder a un caso de venganza por infidelidad, como habría ocurrido en casos similares.
“La recepcionista escuchó que están contando eso, se lo comentó a mi novia y ella le pidió al hombre que se acerque a comisaría a denunciar. Se negó y se dio a la fuga. Lo único que sabemos es que tiene un Honda City, pero nada más”, relató el joven.
Al aguardo de novedades
Más allá de los graves sucesos de los que fueron víctimas, Lucas aprovechó a destacar el comportamiento del dueño del hotel que los ha acompañado en todo momento. Además, el propietario del alojamiento fue testigo de los dichos del hombre desaparecido, y prestó declaración en comisaría para colaborar a esclarecer los hechos.
“El que tiró la bomba fue un pibe mandado”, afirmó Lucas. Hasta el momento, permanecía junto a Karen en Jujuy, sin medio de transporte, realizando todos los trámites correspondientes. Eso incluyó la búsqueda de un abogado, a quien le otorgaron un poder para continuar con la causa una vez que regresen a Rafaela.
“Vine a vacacionar, a pasarla bien, y me voy hecho mierda. La policía muy lerda, muy mal. Es muy grande el grado de inoperancia. Después de ir del abogado, tuvimos que salir a hablar con los medios para que alguien nos dé una mano. Si nos quedamos de brazos cruzados, esto queda en la nada. Acabo de perder un auto que no lo puedo comprar nunca más en la vida. Labure toda la vida para ese auto”.