Se trata de una réplica de una bomba y un proyectil de guerra. Uno fue hallado en Arroyito y otro en la localidad de Álvarez.
La Policía de Santa Fe identificó este domingo dos artefactos explosivos en la vía pública. Uno en la ciudad de Rosario, en el barrio de Arroyito, y otro en la localidad de Álvarez. Por la mañana fue hallado un paquete sospechoso en una parada de colectivos de Arroyito y por la tarde un proyectil de guerra en un contenedor de basura.
Una mujer llamó al 911 este domingo por la mañana para alertar la presencia de "un paquete sospechoso que podría tratarse de una bomba" en la parada de colectivos ubicada en Avenida Alberdi y Vélez Sarfield. Rápidamente la Policía llegó al lugar y, luego de tomar las medidas de seguridad pertinentes, abrió el paquete y comprobó que no tenía materiales explosivos.
Si bien el artefacto era falso, todos sus componentes eran los de un artefacto explosivo real. Tenía una antena receptora, una plaqueta y podía ser ativida por teléfono. Además, la dimensión del paquete y el papel madera simulaban panes de trotyl.
Interviene el fiscal Mariano Ríos, de la unidad de Flagrancia, quien dispuso las medidas investigativas iniciales. Entre ellas, tomar testimonios a posibles testigos y realizar un relevamiento de las cámaras de videovigilancia de la zona.
En tanto, la Policía también debió intervenir en la localidad de Álvarez, donde encontraron un proyectil de guerra en un contenedor de basura ubicado en la intersección de calle Las Heras y Cerrito, de esa localidad.
El hecho también ocurrió este domingo, en horas de la tarde. Tras tomar las medidas de seguridad correspondientes, identificaron el artefacto. Se trata de un proyectil de mortero de 81 milímetros, de los que utiliza el Ejército Argentino, en buen estado de conservación.
Aunque no tenía espoleta detonadora, sí tenía una carga de exógeno. Es decir que se le podría extraer el explosivo y armar dispositivos caseros.
Al igual que en el caso de Arroyito, interviene el fiscal Ríos quien pidió que se realicen las tareas de rigor, solicitó un croquis ilustrativo y un relevamiento de las cámaras de videovigilancia.
Fuente: La Capital