“No hay que dejar a alguien llorando solo" fue la frase que utilizó Ciro para resumir lo que hizo en un partido de fútbol.
La categoría 2014 del Club Sportivo Ben Hur de Rafaela festejaba el pase a la final con este golazo de penal. Pero Ciro, arquero del equipo ganador, decidió desprenderse del grupo para tener un verdadero gesto de nobleza deportiva.
Sin dudarlo, volvió al arco donde estaba el rival, lo levantó del piso y se fueron abrazados hasta el vestuario.
Con este pretexto, RADIO RAFAELA se juntó con toda la categoría 2014 del lobo y charló un rato con Ciro, el protagonista de la historia, con Elio, el padre y con Pablo Aguilar, profe de la categoría.