La imagen fue capturada por un astronauta a bordo de la Estación Espacial Internacional y generó todo tipo de reacciones.
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En un reciente descubrimiento , la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) compartió una imagen asombrosa que ha capturado la atención mundial. Esta foto revela una formación volcánica en el desierto del Sahara que sorprendentemente asemeja una calavera. La imagen fue capturada por un astronauta a bordo de la Estación Espacial Internacional, ofreciendo una perspectiva única de la Tierra. La fosa volcánica, ubicada en los montes Tibesti de la República del Chad, tiene una profundidad de mil metros y presenta una apariencia inquietante cuando se ve desde el espacio.
La foto de esta agencia espacial muestra lo que parece ser un enorme cráneo con cuencas oculares y una nariz distintivas. Estas características son en realidad conos de ceniza y colinas cónicas que rodean respiraderos volcánicos. Rodeando esta "cara", hay un material blanco, identificado como una costra mineral compuesta de natrón. Este hallazgo es significativo no solo por su singular apariencia, sino también por su ubicación en una de las áreas más remotas e inaccesibles del planeta, un factor que limitó investigaciones previas.
La foto de la NASA de la calavera que capturó desde el espacio
La NASA dio a conocer detalles de una imagen que capturó desde el espacio. La foto de la "calavera", tomada en febrero de este año, fue compartida por el Observatorio de la Tierra de la agencia espacial norteamericana, destacando una fosa volcánica en los montes Tibesti. Esta área, conocida por su difícil acceso, ha sido un desafío para los científicos que buscan estudiar sus características y formaciones. La imagen proporciona una perspectiva única de este paisaje volcánico y su singular formación.
La comunidad científica se mostró sorprendida ante esta imagen, al igual que el público en general. La NASA describió en su blog que la fosa tiene el aspecto de un "rostro fantasma" que parece mirar fijamente desde el desierto. Además, la agencia espacial reveló que la región, ahora seca y desolada, estuvo una vez cubierta por un lago glaciar hace aproximadamente 14 mil años. Los hallazgos de algas acuáticas fosilizadas, recolectadas en 2015, sugieren, además, que la zona estuvo habitada hace unos 120 mil años.
De qué se trata la misión Starliner de la NASA
La misión Starliner de Boeing, en colaboración con la NASA, tiene como objetivo principal transportar astronautas a la Estación Espacial Internacional. Los módulos de tripulación y servicio de Starliner están actualmente acoplados y en espera de los procedimientos estándar previos al lanzamiento. Además, el cohete Atlas V, que impulsará la nave, ya se encuentra en Florida, listo para su integración con Starliner.
Los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams, seleccionados para esta misión, continúan su entrenamiento intensivo para su estadía de aproximadamente ocho días en el laboratorio orbital. Cabe destacar que Starliner ya ha realizado dos pruebas de vuelo sin tripulación, con una de ellas logrando acoplarse a la ISS en mayo de 2022. Esta nave representa una alternativa al Crew Dragon de SpaceX, que ya ha transportado astronautas a la ISS en misiones anteriores.
Qué encontró la NASA en un asteroide durante la misión Lucy
El sobrevuelo de Lucy al asteroide Dinkinesh no fue solo un chequeo de rutina. Las primeras imágenes que la sonda transmitió a la Tierra mostraron una realidad inesperada: el asteroide que pensaban era un solo objeto era, de hecho, un sistema binario. Este descubrimiento, anunciado con entusiasmo en el blog oficial de la NASA, supone un avance en la comprensión de los componentes del cinturón principal de asteroides, y refuerza el propósito de Lucy de expandir nuestros horizontes cósmicos.
El equipo a cargo de esta misión estuvo liderado por Hal Levison del Southwest Research Institute de Boulder, Colorado. En su trabajo destacaron que el asteroide Dinkinesh cuenta con 11 cuerpos celestes que pueden ser explorados por Lucy, ampliando significativamente el alcance científico de la misión.
En la fase de aproximación al encuentro, el equipo de Lucy ya albergaba sospechas sobre la naturaleza binaria de Dinkinesh, basadas en las fluctuaciones de brillo observadas. Estas conjeturas se confirmaron con las imágenes captadas, las cuales permitieron estimar dimensiones aproximadas para ambos cuerpos del sistema binario. Además, este encuentro funcionó como una prueba práctica para el sistema de seguimiento autónomo de Lucy, que se desempeñó con precisión a velocidades de 10.000 millas por hora, un desafío adicional superado por el equipo de ingeniería de Lockheed Martin, un colaborador clave en este emprendimiento espacial.
Fuente: C5N
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